ESCUCHARPedirán a los dadores de carga, centralmente la industria, un reajuste en los precios y la rediscusión de las formas de pago. Los autoconvocados siguen de paro
Los transportistas de carga cordobeses anunciaron que comenzarán a discutir con los dadores de carga (la industria, principalmente, pero también las empresas distribuidoras y de logística) un ajuste en las tarifas, ya que «durante el mes en curso se proyecta un incremento que al día 18 de agosto ya rondaba el 17% de los costos«.
La realidad del sector, posterior a la devaluación del 14 de agosto, presenta «aumentos que inciden directamente sobre los costos de la actividad», y «es por eso que desde la Cedac entendemos que todos los actores deberán afrontar con sentido común ésta situación límite de un sector tan vital e importante como el transporte de cargas». La Cedac es la cámara que agrupa a las empresas dedicadas al transporte de cargas en Córdoba.
«La multiplicidad de factores coyunturales de la economía argentina ha puesto en estado de vulnerabilidad a toda la actividad del transporte de cargas», señaló la entidad en un comunicado distribuido a la prensa.
«El escenario de un atraso tarifario sumado a la reciente devaluación se tradujo en fuertes incrementos en las distintas cotizaciones del dólar, con un fuerte impacto sobre los costos de reposición y mantenimiento de camiones; alto incremento en el precio del gasoil que alcanza el 19,1% en la provincia de Córdoba; suba de tarifas en peajes, en tasas de interés y en costos de distintos insumos, como neumáticos, lubricantes, repuestos y otros ítems», precisaron.
«Toda esta situación hace que la sostenibilidad de la actividad de las empresas esté en serio riesgo haciendo aún más difícil la negociación de tarifas y las formas de pago con los dadores de carga», agregó la cámara empresarial, que también reclamó la intervención de autoridades locales y nacionales ante la problemática, de modo de asegurar el normal desenvolvimiento de la actividad.
En tanto, transportistas de cargas autoconvocados, centralmente de la provincia de Buenos Aires, que nuclean al traslado de cereales, carne y lácteos, mantienen un paro por tiempo indeterminado, que ya comenzó a generar cortes en la cadena de distribución con especial impacto en la provisión de productos frescos. Argumentan que el combo de inflación y devaluación les generó un alza de costos y que las tarifas actuales hacen inviable la actividad.
