ESCUCHAREl paseo por una de las siete maravillas naturales del mundo está acompañado de circuitos culturales, recreativos y comerciales de gran interés.
La visita a las cataratas del Iguazú, uno de los patrimonios más ricos y maravillosos de Argentina, puede estar acompañada de infinidad de circuitos culturales, recreativos y comerciales que complementan el destino.
El parque nacional cuenta con diversas pasarelas que regalan un viaje en contacto con los saltos de agua y la frondosidad de la selva. En este marco, a bordo de un tren ecológico, los turistas pueden introducirse en el parque natural y palpar de cerca los sonidos, aromas y colores del entorno misionero. El transporte conduce directamente al ingreso de la pasarela y desemboca en la Garganta del Diablo, la caída de agua de más de ochenta metros de altura más importante y conmovedora del mundo. También se puede arribar a ella embarcados por el río Iguazú.
Pero más allá de esta experiencia única, quienes se encuentren en la zona pueden disfrutar de otros atractivos, como los que se describen a continuación:
Aguas danzantes: funcionan en el hito de las tres fronteras. Se trata de un show de agua, luces y sonido sobre un escenario inédito ubicado en la intersección de Argentina, Brasil y Paraguay.
Orquideario del indio solitario, un vivero particular integrado por diversas especies de la selva misionera. En este predio se cultivan alrededor de cuarenta variedades de orquídeas de la región, tanto nativas como importadas de otras zonas.
Jardín de los Picaflores, un espacio verde que invita a la relajación y contemplación habitado por más de 150 ejemplares de aves.
La Aripuca, obra construida en homenaje a la selva misionera con aproximadamente 500.000 kilos de madera recuperada.
Cabalgata ecológica del indio solitario, un paseo por la selva en compañía de guías especializados por la laguna de los yacarés y las aldeas guaraníes.
El guira oga, “casa de los pájaros” en idioma guaraní, el único refugio de animales salvajes localizado en la selva misionera, en el paisaje protegido «Andrés Giai» (ruta 12, km 5).
Biocentro Iguazú, una muestra viva de los diferentes extractos de la flora y fauna nativa y del mundo. Sitio para contemplar diferentes escenarios como el mariposario, pitonario, tortuguero, reptilario, acuario y la laguna de las aves.
Aldea aborigen, paseo en vehículos equipados hasta llegar a la aldea aborigen Fortín M’Bororé, un pueblo guaraní de 140 familias que forma parte de las 74 comunidades misioneras.
Iguazu Forest, empresa que realiza actividades de ecoaventura tales como rapel, canoping: desplazamiento entre plataformas situadas en las copas de los árboles y caminatas por la selva.
Por su parte, para los amantes de las compras, Puerto Iguazú es de gran tentación. Entre sus destacados, cuenta con el duty free shop, elegido por cuatro años como el mejor duty free del mundo donde se pueden adquirir bebidas, perfumes, electrónica e indumentaria de las principales marcas internacionales. También se destaca la feirinha, que suma 70 locales comerciales y gastronómicos donde se pueden saborear exquisitos platos y adquirir vinos, licores, embutidos, aceites de oliva, dulces de leche y alfajores.
En cuanto a las actividades nocturnas, se recomienda visitar el Ice Bar Iguazú, el único bar de hielo ubicado en la selva misionera.
Más información en www.iguazuturismo.gob.ar
