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Lo señaló Martín Lousteau en la apertura de la Expo Real Estate 2010, en Buenos Aires. También señaló que la volatilidad impide el crédito a largo plazo y que el valor de la tierra aumenta y cuesta impulsar nuevas áreas de desarrollo. Por Laura Pantoja / Enviada especial / [email protected]
Comenzó ayer en Buenos Aires el principal encuentro de negocios e inversores del Real Estate del país. La Expo Real Estate 2010 y el 2° Congreso de Desarrollos e Inversiones Inmobiliarias copa los salones del Hilton Hotel Buenos Aires, hasta hoy.
En el marco de la muestra se lleva a cabo paralelamente el 2° Congreso de Desarrollos e Inversiones Inmobiliarias, en el que Martín Lousteau, ex ministro de Economía y director de la Consultora LCG, estuvo a cargo de su apertura. “Nuestra economía se ha caracterizado por ser muy volátil, y su principal problema es que no afecta de forma simétrica los distintos estratos sociales. Cuando la economía sube, el que se beneficia es el que tiene ahorros previos para aprovechar las altas tasas de interés; cuando hay una devaluación, se perjudica el que no tiene capital financiero, físico o humano”, indicó.
El directivo agregó que esta condición impide el desarrollo de un crédito a largo plazo y, al mismo tiempo, que las empresas implementen estrategias prolongadas en el tiempo. “Es muy difícil ver señales a largo plazo en el mercado, y por eso, en ciertos sectores empiezan a aparecer anomalías en relación con su devenir normal”, añadió.
Con todo, Lousteau aseguró que la incertidumbre genera un mercado inmobiliario anómalo, por diferentes motivos: no hay crédito, el mercado es muy pequeño (sólo cinco por ciento de los trabajadores en blanco cuenta con el dinero suficiente para tomar un préstamo a 20 años para una vivienda de 70 mil dólares); y la actividad está muy concentrada, porque son pocos los que pueden comprar y, por ende, “se construye donde los que pueden comprar quieren vivir”.
Esta situación transforma a la tierra en el factor limitante, que trae aparejada la suba del precio, según agregó. Además, acotó que las zonas que crecen son las que corresponden a sectores altos, con lo cual cuesta descentralizar e impulsar nuevas áreas.
El ex funcionario concluyó que el mercado inmobiliario está muy concentrado y vaticinó que mientras haya dinero en los sectores que pueden ahorrar, el círculo se va a mantener. “A esto se le suma la inflación, que disminuye aún más las posibilidades de inversión en el sector inmobiliario”, apuntó.
Con vistas al futuro, enfatizó que es preciso “bajar de la economía de la montaña rusa” y, sin dejar de mencionar las ventajas competitivas del país que funcionan como oportunidades de negocios en el exterior, dejó en manos del Estado “la responsabilidad de hacerse cargo del riesgo a largo plazo”.
Durante toda la tarde de ayer, y en el transcurso de la jornada de hoy, destacados oradores y expertos del sector continúan brindado su visión estratégica en materia de tendencias y novedades del Real Estate.
La muestra, que congrega los principales desarrollos del país y la región, reúne a cerca de 150 expositores, entre referentes en el rubro de materiales de la construcción, desarrollistas, consultores de proyectos, empresas constructoras e inmobiliarias. Córdoba está presente a través de la Cámara de Corredores Inmobiliarios de la Provincia de Córdoba (Cacic), del Centro de Investigaciones Inmobiliarias (Cedin), Cámara de Desarrollistas Urbanos de Córdoba (Ceduc) y de firmas como Edisur y Grupo Dinosaurio, entre otros. En este marco se desarrollan más de 40 workshops con soluciones y propuestas diferentes.
