Conmoción, negación y estrés son las principales reacciones defensivas ante los incendios

Las catástrofes y emergencias tienen impacto a largo plazo en las poblaciones . Además de las consecuencias económicas, productivas y medio ambientales, también se contabilizan los efectos en la salud de los seres humanos, tanto en su dimensión física como psíquica.

Recientemente, los incendios en Corrientes muestran cómo estos fenómenos -que involucran cuantiosos daños en el entorno- también influyen significativamente en aspectos subjetivos de las personas que pertenecen a las comunidades afectadas.

Particularmente, en lo referido a los incendios forestales (ya sean causados intencionalmente por el hombre o producto de las condiciones climáticas), se puede detectar una fuente incidencia en el comportamiento y las emociones de los seres humanos .

Así lo indica una nota de recomendaciones de la Asociación Americana de Psicología (APA por sus siglas en inglés) , la cual -además- precisa que el estado de conmoción, la negación y el estrés son respuestas recurrentes de los individuos que se encuentran en estas terribles situaciones.

" Es común que las personas que han vivido estas circunstancias experimenten emociones fuertes", aseguró la entidad y agregó: " Comprender las respuestas normales a estos eventos anormales puede ayudar a sobrellevar de manera efectiva los sentimientos, pensamientos y comportamientos", en la medida en que las personas se recuperan posteriormente a la catástrofe.

En estos delicados momentos, tal como lo plantea la entidad que agrupa a profesionales de la salud mental en Estados Unidos, " la conmoción y la negación" resultan "respuestas típicas" y defensivas ante los desastres naturales a gran escala, especialmente poco después del evento.

Si bien el comportamiento posterior a la tragedia es diferente en cada persona, los especialistas señalaron que es posible además que se presenten otros síntomas como una mayor intensidad y variación de los sentimientos, cambios repentinos de ánimo, recurrencia de los recuerdos sobre lo acontecido y un incremento en la ansiedad.

"Los recordatorios o desencadenantes como el humo, las cenizas, las sirenas o los camiones de bomberos pueden crear ansiedad", precisa el documento disponible online, a la vez que advierte de que el estrés que acompaña estás vivencias pueden sumarse a síntomas físicos como dolor de cabeza, náuseas y dolor en el pecho.

Sugerencias

Aunque la realidad que enfrentan quienes vivencian lo traumático de los incendios es muy difícil de abordar, sí es posible crear estrategias que posibiliten mejorar las condiciones para lograr algún grado de estabilidad psíquica frente a lo trágico.

Con este objetivo , APA recomienda que las personas sepan que la adaptación a las nuevas circunstancias se realizará con el tiempo.

Además, resulta fundamental orientarse por la ayuda de los seres cercanos y de la comunidad , acercándose incluso a espacios de apoyo que estén liderados por profesionales.

"Estos grupos pueden ser especialmente útiles para personas con sistemas de apoyo personal limitados", dice la nota de la entidad.

Por otro lado, mantener -en la medida de lo posible- conductas saludables de alimentación y descanso contribuye a tomar mejores decisiones sobre el futuro, así como evitar el consumo de alcohol y sustancias psicotrópicas (si no es por indicación profesional).

Además, es clave prestar especial atención a los comportamientos y sentimientos de los más chicos del hogar y de la comunidad , animándolos a expresarse sobre lo sucedido.

Aun así, APA señala que aunque "algunas personas pueden hacer frente con eficacia a las demandas emocionales y físicas provocadas por los desastres naturales, como los incendios forestales, utilizando sus propios sistemas de apoyo (...), los problemas graves pueden persistir y continuar interfiriendo con la vida diaria"

Así, " las personas con reacciones prolongadas que interrumpen su funcionamiento diario deben consultar con un profesional de salud mental capacitado y con experiencia".

Alerta internacional

Más allá de la gravedad de la situación de Corrientes, lo cierto es que los incendios forestales son una problemática global.

"De Australia a Canadá, de los Estados Unidos a China, a través de Europa y el Amazonas, los incendios forestales van causando estragos en el medio ambiente, la vida silvestre, la salud humana y la infraestructura", alertó un nuevo informe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente , detallando que este tipo de catástrofes se incrementará 50% a finales de siglo.

" El fuego está cambiando porque estamos cambiando las condiciones en que se produce. No todos los incendios son dañinos, y no todos los incendios necesitan ser extinguidos, ya que sirven a importantes propósitos ecológicos . Sin embargo, los incendios forestales que arden durante semanas y que puede afectar a millones de personas en miles de cuadrados kilómetros presentan un reto para el que no estamos preparados", indicó el documento.

Al respecto, el programa de Naciones Unidas asegura que es imperioso iniciar una acción multilateral que contemple una auditoría inicial sobre las pérdidas económicas que implican estás catástrofes.

Como ejemplo, la carga económica anualizada de los incendios forestales para los Estados Unidos se ubica entre US$71,1 mil millones y US$347,8 mil millones.

Corrientes : Anunciaron un plan con una inversión de $400 millones para recuperar los Esteros del Iberá

El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, presentó este miércoles a la mañana un programa denominado “Renacer Iberá”, que contempla una inversión de 400 millones de pesos para recuperar la zona de los Esteros del Iberá, vegetación autóctona y fauna silvestre afectada por los incendios y la sequía.

En el salón Amarillo de Casa de Gobierno, el mandatario correntino anunció que 200 millones de pesos son recursos inmediatos que se destinarán al Comité Iberá para comenzar la reconstrucción y el resto irá al Centro Aguará para la atención a los animales silvestres.

Sobre la catástrofe ambiental por los incendios, expresó que “ es el golpe más grande" que tuvo la provincia y dijo que afectó en gran medida “a nuestros bosques nativos y nuestra fauna ”.

Por otra parte, adelantó que buscarán “recursos de organismos nacionales e internacionales para recuperar este patrimonio natural de los argentinos y el mundo”.

"Confío plenamente que esta catástrofe nos va a unir y permitir tener objetivos claros hacia el futuro, todos juntos. Solamente así vamos a reconstruir naturaleza , mirar al futuro juntos y este es el primer paso para que el Iberá vuelva a renacer”, concluyó .