Reconocen vínculo laboral a ex empleado de un “parripollo”

Si bien el demandante no logró acreditar que había sido encargado del negocio demandado, sí demostró que prestaba tareas en el lugar. Lo indemnizan por varios de los rubros reclamados [privado]

Con sustento en la prueba rendida, y partiendo de la presunción de existencia de relación laboral dado por el reconocimiento del demandado de ciertas tareas presentadas por el actor, la Sala 6ª de la Cámara de Trabajo de Córdoba reconoció la dependencia laboral del accionante, admitiendo la demanda por la que éste pretendía las indemnizaciones derivados del despido indirecto por negativa del vínculo y salarios adeudados.

Leonardo Ferreyra Mingorance inició acción en contra de Pablo Fabián Magrini, como titular del local comercial “El Pollo de Tres Patas”, denunciando que desarrolló actividad de encargado sin registración.

Al resolver, el tribunal integrado por la vocal Nancy El Hay indicó que la aseveración que efectuó Magrini, permite presumir la existencia del ligamen laborativo invocado en demandada, en los términos del artículo 23 de la Ley de Contrato de Trabajo (LCT), en tanto luego de manifestar que habían convenido el inicio de su desempeño en julio, aclaró que asistió un par de fin de semanas, denotando la prestación que subsume la situación en la norma.

Premisas

Bajo esas premisas, al valorar la prueba testimonial, la magistrada corroboró la existencia de una relación laboral detectada y, atento a ausencia de documentación prevista por la LCT (libro artículo 52, recibos de haberes, planillas de horarios y descansos), en función de lo dispuesto por los artículos 55 ib. y 39 inc. 1 LPT, señaló que cabe presumir la veracidad de las condiciones contractuales denunciadas en la demanda.

Asimismo, el fallo reparó que, con relación a la jornada, un testigo dijo que el accionante iba los fines de semana “a veces”, “viernes o sábados”, “generalmente al mediodía” para luego decir que “no iba por la noche”, quedándose hasta las 15 cuando, como lo afirmó el accionado desempeñaba en un establecimiento fabril de lunes a viernes en horario vespertino.

Categoría

Con relación a la categoría de encargado invocada, precisó la vocal que fue expresamente contrarrestada por testimonio que aseguró que esa función la desempeñaba Magrini, aludiendo sólo a la colaboración en la parrilla y entrega de productos a los clientes.

Luego, la jueza El Hay analizó la ruptura con el intercambio epistolar, verificando la injuria en la negativa del demandado respecto del vínculo, a lo que se sumó la ausencia de registración, concluyendo que su gravedad justificaba la denuncia del contrato por parte del trabajador.

En definitiva, por lo expuesto en el fallo se resolvió que correspondía acoger parcialmente la demanda incoada por Mingorance en contra de Magrini, en cuanto por ella perseguía el pago de salario de septiembre, proporcional mes de octubre, SAC y vacaciones proporcionales al año 2016, indemnizaciones por antigüedad, sustitutiva del preaviso, integración del mes de despido y los resarcimientos previstos en los artículos 2 ley 25323 y 80 LCT, así como la entrega de documentación de aportes y contribuciones y certificado de trabajo.