Después de cobrar la deuda liquidada, no se permite capitalizar los intereses

La Cámara 8ª Civil y Comercial de Córdoba confirmó la resolución de primera instancia que rechazó la petición de Provencred SA, de capitalización de intereses sobre una deuda que ya había sido cancelada al retirar la accionante la orden de pago, por entender que no opera el anatocismo de manera retroactiva.

En etapa de ejecución de sentencia, la entidad financiera formuló nueva liquidación, en la cual capitalizó intereses de la planilla anterior, ante lo que el juez a quo ordenó reformular dicha planilla, por entender que no correspondía el anatocismo sobre intereses cancelados previamente por una orden de pago, resolución contra la cual la actora interpuso reposición con apelación en subsidio.

El tribunal integrado por los vocales Gabriela Eslava y Héctor Hugo Liendo, al ingresar al análisis del recurso, señaló que el apelante se agraviaba porque el a quo, mediante el proveído impugnado, “ ordena reformular la planilla al entender que no resulta admisible adicionar en una liquidación presentada el reconocimiento de intereses sobre los intereses cancelados a través de una orden de pago anterior debido a que el derecho al anatocismo sobre tales intereses se ha extinguido con su pago ”.

En ese orden de ideas, la alzada evaluó que, conforme surge de las constancias de la causa, “ nos encontramos en la etapa de ejecución de sentencia de una causa en la que se hizo lugar a la demanda interpuesta por la parte actora y en lo que aquí interesa, se formuló planilla, la que fuera probada ”.

La cámara agregó que a continuación se libraron órdenes de pago por intereses de honorarios e intereses de capital y luego indicó que el actor “ formula nueva planilla tomando como base de cálculo para los intereses hasta el libramiento de las órdenes de pago, tanto el capital como los intereses que contenía la planilla anterior ”.

A ello se agregó que en dicha planilla se ordena reformular, “ decisión que ahora es cuestionada con invocación de la potestad de capitalizar del art. 770 del Código Civil y Comercial de la Nación (CCyC) ”.

Bajo esas premisas, los vocales apuntaron que, “que tal cual lo afirma el recurrente, entre las planillas ha transcurrido en exceso el plazo de seis meses que exige tanto la norma del CCyC” como la doctrina judicial local”.

Sin embargo, el fallo observó que tal capitalización “ es facultativa y no automática ”, lo que importa que “ el mero transcurso del tiempo no capitaliza los intereses si no existe una voluntad en tal sentido por parte del acreedor, que se exteriorice con la formulación de la planilla ”.

Facultad

En otras palabras, la cámara indicó que para que opere la capitalización autorizada por la norma, “ es necesario que el actor realice una nueva planilla ejerciendo la facultad que la norma le concede ”.

Por lo expuesto, se entendió que si la liquidación es aprobada (por no haber sido observada y haberse formulado conforme a derecho, o luego de un incidente de impugnación), y si el deudor no cumple, “ al formularse la próxima liquidación, el acreedor queda habilitado a capitalizar los intereses que se han devengado hasta la primera (aunque también puede optar por no hacerlo) ”.

En esta línea, el tribunal derivó que si el actor no formuló nueva planilla capitalizando los intereses, “ no puede luego de haber cobrado gran parte de la liquidación anterior, pretender capitalizar retroactivamente ”.

Asimismo, los jueces advirtieron que “ apelando al argumento apagógico, la solución surge clara en tanto se vislumbre que, de seguirse la tesis que propugna el recurrente, luego de transcurridos 24 meses entre dos planillas, el actor podría capitalizar cuatro veces (cada seis meses) hacia atrás en el tiempo, lo cual sin dudas carece de sentido y afecta incluso al derecho del deudor que nunca va a saber en definitiva cuánto debe ”, quedando así, “ sujeto a una supuesta capitalización automática no ejercida jamás por el deudor pero que podría ser ejercida a futuro y en forma retroactiva ”.

En conclusión, el fallo sostuvo que “ no puede admitirse lo requerido por el recurrente puesto que la capitalización de los intereses no deja de ser un derecho que puede ser ejercido y que también puede optarse por no hacerlo, infiriendo que no hacerlo impide que luego se intente de forma retroactiva como se pretende en esta oportunidad ”.

En síntesis, en el fallo se resolvió que corresponde rechazar el recurso de apelación en subsidio, y en consecuencia, confirmar el proveído recurrido, todo ello, con costas por el orden causado atento no haber mediado oposición.