Rechazan caducidad de oficio sobre demanda de compensación económica

Frente a la decisión de la jueza de primera instancia, la Justicia de Familia de Córdoba señaló que -en este tipo de acción- el fondo es materia disponible por las partes, no pudiendo el tribunal dictar la caducidad, salvo en situaciones específicas [privado]

Al considerar que es improcedente declarar de oficio la caducidad de la acción de compensación económica, porque es materia disponible por las partes, la Cámara de Familia de Primera Nominación de Córdoba revocó la resolución de primera instancia que había rechazado in limine una presentación en tal sentido, ordenando que admita la presentación de la demandada y se le dé el correspondiente trámite.

En la causa, la señora G. P. R. llevó a revisión del tribunal de alzada la resolución de la jueza de Familia de primera instancia que rechaza de manera liminar la demanda de compensación económica interpuesta en contra de su ex cónyuge, señor J. E. M., con base en la caducidad de la acción establecida en el artículo 442 del Código Civil y Comercial de la Nación (CCCN).

El tribunal integrado por los vocales Fabián Eduardo Faraoni y Rodolfo Alberto Ruarte , al analizar la apelación presentada, señaló que el artículo 442 del CCCN, dispone: “La acción para reclamar la compensación económica caduca a los seis meses de haberse dictado la sentencia de divorcio”.

"La declaración de oficio de la caducidad depende de dos presupuestos interdependientes: por un lado, se requiere una caducidad de origen legal y no convencional y, por el otro, que se refiera a derechos indisponibles, esto es, derechos materiales sustraídos del ámbito de la autonomía de la voluntad de las partes".

A tenor de esta normativa, la Cámara analizó si el rechazo inicial de la demanda de compensación económica fue correcto, evaluando si el plazo de caducidad previsto por la ley debió aplicarse de oficio, como lo hizo la jueza preopinante.

Artículo

Al respecto, el tribunal señaló que de conformidad al artículo 2572 CCCN el juez “sólo está autorizado a declarar de oficio la caducidad cuando está establecida por la ley y se trata de materia sustraída a la disponibilidad de las partes”.

Así, en el fallo se advirtió que la declaración de oficio de la caducidad depende de dos presupuestos interdependientes: por un lado, se requiere una caducidad de origen legal y no convencional y, por el otro, que se refiera a derechos indisponibles, esto es, derechos materiales sustraídos del ámbito de la autonomía de la voluntad de las partes (procesalmente indisponibles).

En esa dirección, los camaristas determinaron que, en el tema bajo análisis, “no cabe duda que la caducidad prevista para la acción de compensación económica es de origen legal (art. 442, última parte, CCCN), como tampoco existe duda que la compensación es un reclamo dentro del ámbito de las relaciones familiares de corte netamente patrimonial y, por lo tanto, materia disponible por las partes”.

Sobre el particular, los sentenciantes remarcaron que la compensación económica “está basada en un interés privado, se conserva dentro de la esfera dispositiva de los cónyuges y, por ello, las partes son libres de acordar, reclamar, renunciar, transar, condicionar y limitar en el tiempo, en tanto no vulneren el orden público, la moral y las buenas costumbres”.

Queja

Por las razones expuestas, el decisorio consideró que, “en el especial caso traído a examen, la a quo no debió rechazar in liminelitis o ex officio una pretensión de compensación económica, sobre la base de la caducidad de la acción y, por ello, la queja es de recibo”.

En definitiva, por lo expresado, en el fallo se resolvió que corresponde hacer lugar al recurso de apelación y, en consecuencia, ordenar a la jueza de primera instancia que, previo los recaudos de ley, admita formalmente la demanda de compensación económica incoada por la señora R. en contra de su ex cónyuge, el señor M., y la tramite y resuelva, conforme a derecho.