ESCUCHARSe determinó que fue sustraída por el denunciado tras engañar a la madre de la infante: le dijo que la traía a Córdoba, de vacaciones
La Justicia de Bolivia ordenó que sea restituida a su madre una niña argentina de seis años, luego de haber concluido que fue sustraída por su padre y llevada a ese país, donde presuntamente fue víctima de abuso sexual y quedó en situación de adopción.
La medida la dictó el juez de Niñez y Adolescencia de Oruro, Carlos Vallejos Flores, en una audiencia virtual realizada con la madre (de nacionalidad boliviana), sus abogados y los psicólogos que intervienen en el caso.
La mujer vio a su hija por última vez en el verano, cuando su ex pareja la engañó y le dijo que la traería de vacaciones a Córdoba.
Se espera que la niña viaje a Buenos Aires en un vuelo que saldrá la próxima semana de La Paz, acompañada por personal de Cancillería. En caso de que se suspenda, se acordó que será ingresada al país por vía terrestre. En ambos escenarios, será escoltada por personal de la Cancillería.
En la audiencia, el magistrado boliviano también ordenó que se abra una causa para investigar al padre de la niña por los presuntos abusos cometidos contra su hija.
La abogada María de los Ángeles Giménez, quien integra el equipo de patrocinio gratuito de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) que asesora a la madre desde fines de abril, celebró la decisión.
«El juez valoró los informes que elaboramos y decidió que la nena tiene que estar con la madre. Fue importante también que destacara lo difícil que fue hacer su vida acá como boliviana que se tuvo que ir de su país», dijo la letrada.
Todo comenzó el 22 de febrero, cuando el padre de la niña le dijo a su ex mujer, con quien convivía sólo por razones económicas, que se iría de viaje con la hija de ambos.
Las supuestas vacaciones durarían aproximadamente una semana, pero el día en que había asegurado que estarían de vuelta en Buenos Aires, no solo no regresó sino que tampoco estableció contacto telefónico con la actora.
El 28 de febrero, un hermano de la madre que vive en Bolivia le dijo que la niña estaba allí con su padre, por lo cual radicó una denuncia por sustracción de menores en la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Número 53 porteña, que solicitó la detención y extradición del hombre.
La mujer pudo hablar brevemente con su hija en tres ocasiones, pero el 4 de abril las comunicaciones se interrumpieron.
Poco después, el 14 de mayo, tomó conocimiento de que su ex pareja había quedado detenido mientras intentaba lograr la custodia de la niña porque ésta, al ser entrevistada por una psicóloga, reveló que su progenitor abusaba de ella.
Desde ese momento comenzó otra odisea para la infante: por orden judicial fue trasladada a una Defensoría del Niño boliviana y luego entregada en la ciudad de Oruro, sin consentimiento de la mujer, a sus abuelos maternos, a quienes ni siquiera conocía.
Representante
Su representante legal relató que en ese momento la denunciante, G.X., narró que durante su infancia fue abusada por su padre; es decir, la persona que quedó a cargo de su hija, y que a partir de ese momento empezó a “insistir por todos los medios y frente a todos los organismos posibles” que le devolvieran a su hija. [/privado]
