ESCUCHARPese a lo que se especula respecto de las retenciones y los anuncios de la presidenta Cristina Fernández, hoy por hoy lo que más preocupa a los productores de granos es el tema de la sequía.
Así se lo confirmó a Comercio y Justicia Juan Carlos Martínez, titular de la Bolsa de Cereales de Córdoba, quien explicó que si bien la situación no es crítica, de prolongarse, en el norte de la provincia ya podría analizarse la posibilidad de que las entidades solicitaran la emergencia agropecuaria.
“Hay que tener en cuenta que la sequía no contempla solamente lluvia, sino también nivel de evaporación. En estos tiempos, se conjugan ambas cosas, llueve poco y el sol está muy fuerte, por lo que el agua se evapora muy rápido”. Y agregó: “en el norte y este de Córdoba, la situación está al límite; en el centro oeste tiende a ser normal, pero hay que considerar que el este, en cuanto a soja, es la zona de mayor producción”, dijo.
-¿Desde la Bolsa de Cereales realizan un control de lluvias? ¿Ustedes deben pedir la emergencia agropecuaria?
-Nosotros hacemos un monitoreo permanente, pero quienes piden en la Secretaría de Agricultura de la Provincia la emergencia son las entidades gremiales; es decir, Federación Agraria, Cartez, Coninagro o Sociedad Rural.
-En este contexto, ¿cómo se espera que se den las cosechas?
-La cosecha viene retrasada. Normalmente la soja se levanta a fines de febrero, pero para este año seguramente se dará a mediados de marzo o más allá.
-¿Cómo están las superficies sembradas respecto de la temporada pasada?
-En el caso de la soja, la superficie sembrada es igual a la anterior; en el caso del maíz, es notoria la baja, pero eso no va a afectar el mercado interno en cuanto a lo que es abastecimiento ya que, gracias a Dios, en este país, siempre producimos más de lo que necesitamos para autoabastecernos. Ahora, en cuanto a los precios, la menor siembra de maíz va a depender de las autorizaciones o no que dé el Gobierno para exportar, ya que si se elimina un jugador (externo), el precio podría caer respecto de la posibilidad de que compita con el mercado internacional.
-¿Se está dando un mayor nivel de venta de soja a raíz de esta suba en el precio internacional?
-En general, cuando la soja supera los $850, hay más oferta. En el caso del trigo, cuando supera los $400 ó $420 también empieza a aparecer oferta, producto del resago. Pero en este último caso, la apertura de las exportaciones y la aparición de permisos incentivó la demanda y llevó a que se acomodara el precio. Y esto, teniendo en cuenta que el período pasado hubo menor producción de trigo que el anterior, pero el resago no está bien dimensionado.
-¿Y?en cuanto a la soja?
-Hay mucha acopiada o retenida por los productores, que están a la espera de un mejor precio. Si se mantuviera en los $850, lo que no es para nada claro, podría aumentar la oferta y llevar a que el precio se equililbre.
-Volviendo al tema del clima, ¿es un factor que tiene que ver con el precio?
-Sí, totalmente. Maíz y soja son productos muy sensibles, en cuanto al precio, al factor climático. Si comenzara a mejorar el nivel de lluvia, seguramente el precio subiría.
