ESCUCHAREl presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes (AESI), Manuel García, pidió al Gobierno que “obligue” a las petroleras y refinadoras a “compartir” ganancias, y que “nacionalice” el petróleo.
De esta manera, y con una representación cercana a 20% de las expendedoras de combustibles, AESI es la primera entidad empresaria en reclamara la medida, con lo que se suma a los movimientos que bregan por la “estatización” de los hidrocarburos.
“Entregar el petróleo fue un gran error”, explicó a Comercio y Justicia el titular de la entidad que nuclea a los expendedores de las llamadas ‘de bandera blanca’. “Esa es nuestra postura desde hace casi 20 años, pero nunca nos escucharon”.
Es que las estaciones independientes carecen de fuerza a la hora de negociar con las petroleras y el permanente incremento de precios y el escaso margen de rentabilidad han determinado que en promedio, “cierren dos estaciones por día”, según el dirigente.
“La situación actual de los expendedores independientes, embanderados y blancos en proceso de exterminio, no puede ser peor”, dijo, y graficó: “Se cierran en promedio dos estaciones de servicio por día. Desde 2005 han desaparecido más de 3.200 centros de expendio. Además, se han perdido 50 mil puestos de trabajo en los últimos cuatro años”.
Al mismo tiempo, García denunció que las sucesivas subas en los precios de los combustibles que autoriza el Gobierno tiene fines recaudatorios.
“El fin de semana pasado hubo un incremento de 2% en las naftas premium y de 3% en los eco diesel. Tenemos subas en los precios cada 15 días , más o menos”, precisó.
“Es que el Estado se queda con aproximadamente 70 por ciento de la venta de combustibles merced a la presión impositiva, entonces al Gobierno le conviene que suban, ya que incrementa lo que recauda”, comentó.
El comunicado difundido a la prensa, indicó: “Es hora de que las autoridades obliguen a petroleras y a refinadoras a que echen mano a las megaganancias que obtuvieron y que remitieron en su oportunidad a sus casas matrices”.
En el escrito, también se sostuvo que “es hora de que el Gobierno, que se preocupa en estatizar malos negocios, nacionalice de una vez por todas la principal actividad económica que sigue siendo el petróleo”. “La injusta situación del mercado minorista de combustibles amerita un tratamiento legislativo que garantice la libre y sana competencia en igualdad de condiciones para todos”, se destacó.
Paro, o más rentabilidad
Asimismo, el dirigente confirmó a este medio que están convocando de manera “urgente” a la mesa de negociación integrada por los dirigentes de las empresas, las cámaras expendedoras de los distintos combustibles, los sindicatos y los representantes de los estacioneros, “para que se tome alguna decisión que vaya en línea con nuestro reclamo”.
“O alcanzamos el 15 por ciento de rentabilidad que necesitamos para subsistir, o desde la mesa de negociación llamamos a un cese de comercialización por tiempo indeterminado”. Y explicó que de la torta del negocio de los combustibles, el margen de ganancia que les queda a los estacioneros es de 9,5 por ciento.
“En la última reunión de la mesa de negociación”, de la que también participó el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, “se comprometieron a ayudarnos, y en el acta -firmada en julio-
