Mientras algunas personas planifican sus vacaciones, otros se preparan para acondicionar su currículum vitae. Navidad, Año Nuevo y vacaciones abren vacantes para cubrir reemplazos o suplencias
Se acerca el verano y para muchos es una oportunidad de encontrar empleo que en un principio puede ser temporal, pero luego puede convertirse en algo duradero.
En los meses de verano se observa un fuerte crecimiento de ciertos trabajos estacionales.
Mientras algunas personas planifican sus vacaciones, otros se preparan para acondicionar su currículum vitae. Navidad, Año Nuevo y vacaciones abren vacantes para cubrir reemplazos o suplencias en varios rubros, en comparación con el resto del año.
Un informe realizado por la Federación Argentina de Empresas de Trabajo Temporario (Faett), establece que los puestos más requeridos en vacaciones son los vinculados a la industria (40%) y servicios (40%) donde se incluye lo referido a la industria del turismo.
Le siguen los sectores de administración y finanzas (10%) y transportes (10%).
Según este informe, los perfiles más requeridos en el sector industrial son producción (40%), técnicos electrónicos y mecánicos (40%), ingenieros de todas las especialidades (10%) y abastecimiento y logística (10%).
Según el relevamiento, durante el verano crece la demanda en los rubros vinculados a servicios hoteleros y gastronomía, especialmente limpieza (50%), mozos (40%) y cocineros (10%).
En lo que refiere al área de back office, entre los perfiles con más demanda se ubican: administrativos (40%), comerciales (40%), cobranzas (10%) y recepcionistas (10%).
Por su parte, los perfiles relacionados al call center y comerciales son los más buscados en el rubro de ventas y marketing.
Por último, los perfiles de programadores (30%), desarrolladores (30%), tecnología web (15%), data entry (15%) y help desk (10%) son los más requeridos por el area de IT y Telecomunicaciones en período de vacaciones, según el informe.
Desfase de habilidades
En otro orden, Faett también acaba de divulgar un relevamiento en el país, en el que indagó respecto del desfase existente entre las competencias demandadas por el mundo laboral y el sistema educativo. Según 70% de los profesionales consultados, este último presenta un déficit respecto a la calidad y profundidad de los contenidos que se dictan y las expectativas actuales de las empresas en determinadas carreras y áreas de trabajo.
La mitad de los consultados coincide en que en la actualidad existe poca claridad por parte de organismos, empresas, consultoras y sindicatos a la hora de presentar las tendencias del mercado laboral.
Por su parte, tres de cada 10 consideran que los programas educativos no se fueron actualizando según la demanda, los restantes atribuye este desfase a la escasa conciencia por parte de las personas en formarse en lo que el mercado demanda.
A su vez, cuando se les consultó a los especialistas de qué manera se podría achicar esta brecha, 40% señaló la adquisición de experiencias de trabajo durante la formación, 30% mencionó la realización de capacitaciones en empresas, y 20% restante indicó que debería realizarse por medio de pasantías.
El informe mostró que el mayor aporte por parte del sistema educativo para el mundo laboral es formación teórica y metodologías de trabajo (50%), la adaptación al trabajo en equipo (20%), la adecuación a una rutina de trabajo (20%), y la adquisición de competencias interpersonales (10%).
