ESCUCHARLos acontecimientos recientes han dado relevancia a la silenciosa gestión en ese aspecto, pero un examen de la composición de las exportaciones permite advertir que en dicha área ya se habían logrado avances notorios.
El lanzamiento exitoso del satélite Arsat 2 el 30 de septiembre ppdo., desde la base de Kourou, en la Guayana Francesa, mediante los servicios del cohete europeo Ariane 5 (Francia), constituye el segundo de esa serie que gira en el espacio y, por estar equipado con tres antenas y dos bandas (Ku y C), permite abarcar como área de prestación de servicios toda América, desde el norte de Canadá hasta el extremo sur patagónico.
Su vida útil se estima en alrededor de 15 años y tendrá una trayectoria inicial de 36 mil km hasta alcanzar la posición 81º que tiene adjudicada; muy semejante a la del primer lanzamiento. El régimen de asignación de fechas y su respectiva órbita para el lanzamiento está severamente controlada para evitar accidentes; y si no llega a usarse en el momento preciso pierde esa autorización.
Desde el instante en que llega a su ubicación definitiva en plenitud, tiene permiso expreso para emitir televisión en forma directa, captar y reemitir en Internet, encarar trasmisiones de información general, así como datos y telefonía IP a toda el área antes referida. El Arsat 1, lanzado en octubre de 2014, estaba equipado con una sola antena en banda ku, cuyo radio de influencia se circunscribe a los límites de nuestro territorio y sus funciones en materia de comunicaciones son muy limitadas.
El origen de ambos reconoce como creadores a los científicos y técnicos especializados del Centro de Ensayos de Alta Tecnología, sito en Río Negro. Su trabajo es muy requerido y realmente encomiable, ya que prefieren trabajar donde lo hacen, desdeñando tentadoras propuestas de, por lo menos otros ocho países. Los especializados en la materia no abundan pues requieren una larga carera de estudio combinada con ensayos muy sofisticados.
El costo total del Arsat 2 fué de US$250 millones (20 millones menos que el Arsat 1), pero la venta de servicios audiovisuales en una tan extensa área geográfica asegura la pronta recuperación de la inversión. No sólo eso: ya está en la última etapa de diseño el Arsat 3 que, seguramente, aportará nuevos campos de servicios y de comercialización. Debe tenerse bien presente que en el conjunto de 207 países que existen en los cinco continentes, sólo 10 -Estados Unidos, China, India, Rusia, Alemania, Francia, Reino Unido, Australia, Israel y nuestro país- operan como tales en esta materia.
El Arsat 2 tiene una plataforma y un peso total al momento del lanzamiento estimado en alrededor de 3.000 kilos; aunque 4/5 partes de ese total corresponden al combustible. En consecuencia, su operatoria plena y el logro de los objetivos buscados exigen la optimización del instrumental instalado en no más de 600 kilos. El hecho de que se haya otorgado un seguro con una prima de 50% es el mejor testimonio del grado de confiabilidad que da, pues casi 2/3 de las plataformas que vuelan por primera vez no logran acceder a ese respaldo.
La incorporación de Argentina al muy selecto grupo de avanzada en la materia es consecuencia directa de los niveles a que ha llegado la investigación y su vocación por incursionar con los resultados en las áreas básicas más complejas del saber humano. Cabe destacar que los Arsat 3, 4 y 5 ya tienen fechas convenidas para su puesta en órbita entre 2019 y 2023 desde el mismo lugar, la base espacial de Kourou.
En consonancia con el más reciente éxito logrado y los futuros programas en marcha, a fin de septiembre ppdo. se elaboró un proyecto de Ley de Desarrollo de la Industria Satelital Argentina, que asegurará las posiciones en el espacio acordadas y la construcción y desarrollo de servicios satelitales, previendo, además, que pasen a ser “declarados de interés público el desarrollo industrial satelital” y, por lo tanto, a concretar la creación del plan geoestacionario argentino 2015-2035.
Otras expresiones del avance tecnológico
La especialidad satelital ha ganado todos los titulares en los últimos tiempos pero la investigación científica y tecnológica no constituye una reciente novedad sino una ratificación de la senda elegida hace bastante tiempo (alrededor de dos décadas). Durante la vigencia de la última dictadura militar (1976/83), los más respetados investigadores debieron emigrar debido a que fueron víctimas de una persecución tan sistemática como absurda, así que desde 1983 en adelante hubo que empezar de nuevo.
Una eficaz tarea de persuasión logró convencer a más de mil de ellos de que retornaran al país a aportar sus esfuerzos e inteligencia para impulsar sus respectivas áreas del conocimiento como misión superadora que enfile el futuro argentino no sólo a las más codiciadas esferas del saber sino a convertir el país en una potencia científico-técnica de trascendencia internacional.
En esta materia, significa sumar refuerzos a una tarea permanente y de larga data que se ha encarado con el firme apoyo, tanto de las universidades como los centros públicos y privados de investigación. Prueba de ello lo constituye el hecho de que en 2014 el tercer gran rubro de exportación fue integrado totalmente por dichos servicios, que elevaron las ventas externas a nada menos que US$5.800 millones; y todo ello está sustentado en el referido conocimiento creativo.
La cifra antes mencionada sólo ha sido superada por las ventas externas de soja (en sus tres expresiones), que totalizaron en el año 2014 US$21.400 millones, y el complejo automotor que generó US$9.450 millones -pero en este caso se requiere de una gran proporción de insumos importados que, en tal sentido, imponen un balance negativo-. Por su parte, el emprendimiento tecnológico espacial se estima que ocupa un personal especializado de alrededor de 500 mil integrantes en funciones permanentes, aunque 25% de ellos atiende a la demanda exterior de productos y servicios de alta calificación, con señalado éxito.
Las actividades específicas están referidas a rubros de ingeniería, computación, auditoria técnica y/o jurídica, software y asesoramiento o dirección y contralor de áreas técnico-científicas. Durante el transcurso de lo últimos 20 años, los notables avances y difusión de Internet, cuya expansión facilitó la globalización, han ido consolidando loss roles vanguardistas en los 10 países referidos.
En nuestro país, Argencon -organización que agrupa las empresas que tienen tales actividades y objetivos- se ocupa además de difundir las actividades de sus asociadas acompañándolas, al iniciar una nueva conquista de mercado, a consolidar sus acciones en áreas recién iniciadas o a las que aspiran a acceder. La evolución realizada a partir del año 2011 inclusive fue tomando un ritmo hasta ese momento desconocido de expansión, que se mantuvo en semejantes condiciones hasta 2013 y disminuyó a la mitad en 2014. No obstante ese “bache” relativo, los voceros de la referida organización han manifestado que tienen plena confianza en la recuperación e incluso superación de ese avance desde el año en curso.
Se señala enfáticamente al efecto que “el mundo sigue necesitando talentos y los jóvenes van a seguir estudiando par atender a esa demanda. Argentina dispone de un sistema que no es volátil y permite predecirlo”, señala el director Carlos Pallotti, quien sostuvo que en estas actividades el nivel del tipo de cambio es menos decisivo y puede ser superado por los SBC con menor dificultad que en otras actividades. Señaló como ejemplo las diferencias respecto a denominados call center “que pueden ser masivos en puestos de trabajo, pero tienen una alta rotación” y no requieren mucha especialización.
En cambio, cuando se trata “de servicios de mayor valor, la franja de tolerancia es más amplia porque importa más la calidad del servicio”. En especial, la banca internacional se distingue por su reclutamiento masivo. Prueba del rol que se acuerda a la calidad laboral no sólo se verifica por la marcada estabilidad de sus componentes sino también por la continua selección entre miles de aspirantes para someterlos a intensos cursos de formación previa. Se cita como un ejemplo de la dinámica que caracteriza las empresas idóneas, el caso de la firma desarrolladora de software Cobans, nacida en 2002, que en la actualidad ya ha logrado exportar 90% al mismísimo EEUU, logrando el año pasado concretar ventas por nada menos que US$58 millones en esa plaza.
La virtud de convertirse en transnacional
El objeto de la actividad y el grado de relevancia del componte creativo que está casi exclusivamente a cargo de los cinéticos y técnicos permite acceder a los más distantes mercados del planeta sin necesidad de instalarse en ellos para proveerlos. Proporciona un claro testimonio de las posibilidades el accionar de la firma antes mencionada. Pallotti refiere además que “En general, nadie hace este esfuerzo de transnacionalización si no es para contratar a mucha gente y disponer de un gran mercado que lo justifique”.
Por eso no se trata sólo de tener buenos profesionales, “pero en el caso argentino se estima que es este aspecto que lo pone en un pie de igualdad y hasta de superación respecto de Brasil y México”. Resulta llamativo y sorprendente que, teniendo ese significativo rango a escala ecuménica, que ha permitido hacer exportaciones de singular relevancia, las cuales se estima serán superadas con amplitud en el presente ejercicio, no se haga una difusión interna proporcional a la verdadera trascendencia que tales circunstancias merecen.
En especial hay que hacer hincapié en el rol que deben cumplir las universidades ya que, estando empeñadas en generar aportes científico-tecnológicos de alta cotización, no han distinguido a la especialidad en satelización como una área prioritaria ni desarrollado una gestión programada para lograr la captación de cerebros jóvenes, dado que hasta ahora han optado por una tarea notoriamente silenciosa que trasciende insuficientemente en la sociedad.
Hace pocos días se difundió en Harvard la clasificación y el rango que han adquirido en el mundo las 500 altas casas de estudio más prestigiosas del mundo y entre ellas figura sólo la Universidad de Buenos Aires que accedió al lugar Nº 120, con lo cual se deja constancia de que ha mejorado su evaluación que en un análisis semejante anterior la situaba en el rango Nº 164.
Este “salto” de reconocida calidad debe constituir un estímulo y ejemplo que todas las demás públicas y privadas deberían adoptar como meta, para acceder a posiciones de excelencia, como la satelital.
