El Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público que lleva adelante el juicio político contra el fiscal José María Campagnoli, suspendido hace una semana por la licencia médica de uno de sus integrantes, resolvió diferir para el próximo lunes la tramitación de la causa.
El 7 de julio se cumplirán los diez días hábiles que la legislación estipula como límite para que un debate en curso deje de ser válido, si es que en ese lapso no se desarrolla una audiencia.
La última sesión del juicio a Campagnoli fue el jueves 19 de junio. El 23, la representante de la Defensoría General de la Nación, María Cristina Martínez Córdoba, presentó un certificado médico que la licenciaba por cinco días a raíz de un cuadro de estrés e hipertensión arterial.
El viernes pasado, Martínez Córdoba presentó otra acreditación y su reposo se extendió hasta el sábado 12 de julio.
Así, a los juzgadores Daniel Adler, Francisco Panero, Juan Octavio Gauna, Adriana Donato, Rodolfo Ojea Quintana y Ernesto Kreplak no les quedará otra posibilidad que convocar para el lunes que viene al suplente de Martínez Córdoba, Leonardo Miño, defensor oficial ante los tribunales orales federales de San Martín.
En ese caso, la discusión será si se le permite ver los videos del juicio o si éste deberá hacerse nuevamente, ya que la ley prevé que los miembros del cuerpo deben estar presentes durante las audiencias, lo que en el caso de Miño no ocurrió.
El fiscal suspendido en diciembre pasado calificó de “una farsa” el juicio político impulsado en su contra por la procuradora General, Alejandra Gils Carbó, con el argumento de que se excedió en la investigación del origen de la fortuna del empresario Lázaro Báez.
Si en octubre no se llega a una sentencia, Campagnoli podrá reincorporarse automáticamente a su cargo.