Qué cambios debe incluir un nuevo Consejo de la Magistratura

La Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia emitió un dictamen sobre la iniciativa que impulsa el Gobierno. Profundas reformas en los procesos de selección de jueces, y modificación en la designación de jurados y en el sistema de destitución de magistrados, son algunos de los aspectos analizados

En plenario de comisiones de Diputados avanza el debate del proyecto por el cual se busca modificar la ley 24937 del Consejo de la Magistratura de la Nació n. La discusión política se centra en la cantidad de miembros que lo integrarán y si corresponde que el titular de la Corte Suprema sea quien lo presida. Sin embargo, hay muchas aristas que deben ser analizadas y que, sin su revisión, no evitarán que el organismo mantenga las mismas falencias que hoy presenta.

Cómo debe garantizar el Consejo de la Magistratura la realización de concursos transparentes; cómo deben designarse los jurados; qué dedicación deben tener los consejeros y cuál es el mecanismo que debe seguir un proceso de destitución de magistrados son algunos de los aspectos que abordó un informe de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) al que accedió Comercio y Justicia.

El sistema de selección de jueces es, sin dudas, una de las principales tareas del Consejo de la Magistratura. Sobre este punto, la ACIJ propone avanzar hacia la obligatoriedad de los exámenes por listado o exámenes generales para jueces de las distintas instancias y fueros, con independencia de las vacantes que existan , metodología similar a la que implementa el Consejo de la Magistratura de Córdoba.

Cabe recordar que actualmente el promedio de duración de concursos, desde su llamado hasta la entrevista personal -última etapa de evaluación-, es de 635 días corridos. Asimismo, si se cuenta el plazo desde que se producen las vacantes , las demoras en promedio entre la vacante y el llamado a concurso es de 519 días corridos .

Para la ACIJ, el sistema propuesto permitiría “realizar exámenes anticipados más seguros, más completos, separados de la urgencia del cargo y en forma más transparente, que permitan contar con órdenes de mérito ya elaborados para el momento en que la vacante se produce”.

La asociación también recomienda modificar el puntaje asignado a cada instancia de evaluación para evitar la discrecionalidad en la selección de los candidatos, asignar un mayor puntaje al examen escrito (60%) y otorgar apenas 10% a la entrevista personal.

“El examen escrito debería ser la instancia de mayor peso en la evaluación de las y los candidatos, ya que es la que permite evaluar sus competencias de forma más profunda y verificable ”, expresa el informe, que plantea, a su vez, la necesidad de asegurar el anonimato en el examen .

Respecto de la evaluación de antecedentes de los candidatos, la ACIJ propone que se priorice el puntaje de cargos concursados y se establezca equiparación entre las tareas ejercidas en el sector público, la academia y el sector privado de manera tal de no favorecer a quienes integran el Poder Judicial.

Por otra parte, también plantea introducir cambios relativos a las etapas de análisis e impugnación de exámenes escritos, antecedentes y entrevista personal, y establecer criterios objetivos para evitar las distorsiones de los concursos .

Destitución

Las demoras injustificadas en los procesos de destitución son moneda corriente en el Consejo de la Magistratura: el promedio total es de 361 días corridos y en 94,14% de los casos el organismo termina por desestimar las denuncias .

Para la ACIJ, esta situación puede modificarse mediante la fijación de plazos perentorios al consejero que sea designado para instruir la causa y la inclusión de sanciones en caso de que los plazos sean incumplidos. Cabe destacar que la asociación considera necesario que los consejeros cumplan la tarea de manera exclusiva .

Jurados

Cómo se elige a los encargados de tomar las evaluaciones a los candidatos es otro de los aspectos que aborda la ACIJ. Recomienda establecer un sistema en el que expertos y expertas se postulen de forma directa como jurados remunerados (remuneración que resulte un adecuado incentivo a la tarea) y que sean seleccionados/as a partir de requisitos de idoneidad objetivos y claros que no dependan de la discrecionalidad de los integrantes del Consejo de la Magistratura ni que queden sujetos al envío de estos listados por las universidades nacionales. Se propone que dichos jurados no pertenezcan a las jurisdicciones donde ejercerá el juez seleccionado, para evitar conflictos de intereses, y que haya paridad de género.

Finalmente, sobre la composición propuest a por el Gobierno -elevar el número de integrantes del organismo a 17 personas-, la ACIJ considera que no violentaría el principio de equilibrio entre estamentos; y, respecto de la discusión sobre la presidencia de la Corte, concluyó que atentaría contra la necesidad de fortalecer una Corte Suprema concentrada en su rol jurisdiccional como máximo órgano judicial del país.