Un ex diputado nacional le ganó un juicio a la empresa en la que trabajaba antes de llegar al Congreso, ya que una vez terminado su mandato no le permitió volver a su puesto de obrero metalúrgico.
Se trata de José Alberto Roselli, legislador por Interbloque Convergencia, a quien la empresa Monarfil SA, que fabrica filtros industriales, deberá pagarle más de 45 mil pesos. En 2001 Roselli fue electo diputado junto Luis Zamora por la agrupación Autodeterminación y Libertad, pero luego se distanció de su colega y formó otra bancada.
El fallo de la Sala 9 de la Cámara Laboral porteña recordó que la ley establece que los trabajadores que dejen de prestar servicios por ocupar cargos electivos tienen derecho a la reserva de su empleo y a su reincorporación hasta 30 días después de concluido el ejercicio de sus funciones.
Asimismo, se enfatizó que prioriza la participación ciudadana y democrática y se consignó que, en el caso, “el empleador no pudo válidamente desconocer que el trabajador había novado su situación laboral en razón de haber asumido como diputado nacional”.