Contrato de retribución periódica impide a abogada cobrar dos veces por el mismo trabajo

La letrada le reclamaba a su comitente honorarios por tareas que estaban incluidas en el vínculo. El tribunal consideró acreditados el sinalagma y los pagos derivados de éste

Al tener por cierto que las tareas de defensa en juicio en las causas laborales llevadas adelante por la abogada F. M. R. en favor de Berclean SA estaban incluidas en un contrato de locación de servicios por el que recibía una retribución periódica, razón por la cual la ejecutante no podía pretender cobrarle a su locataria dos veces honorarios por una misma causa, la Cámara 8ª Civil y Comercial de Córdoba rechazó el recurso de apelación presentado por la letrada accionante y confirmó la sentencia de primera instancia que hizo lugar a la excepción de pago interpuesta de la demandada.

El tribunal integrado por los vocales Rosa Molina de Caminal, Gabriela Eslava y Héctor Liendo sostuvo que los términos en que se trabó el pleito sobre el que debía expedirse se circunscribía a verificar si la prueba rendida en el proceso resultaba suficiente a fin de receptar la defensa de pago opuesta por la ejecutada y rechazar la demanda.

De las pruebas, la alzada entendió que surge con claridad la inviabilidad del cobro de la deuda por honorarios que reclamaba la ejecutante, en razón de verificarse la existencia de un contrato de retribución periódica entre la accionante y la empresa.

Así, se indicó que la circunstancia de que la actora acompañara copia certificada de sentencia, la cual se encuentra firme y en condiciones de ser ejecutada, no resulta óbice para que la demandada pueda oponerse a dicha ejecución, entablando la excepción de pago.

Postura

El tribunal consideró que propiciar la postura contraria, como sostuvo la accionante, podría derivar en una derogación virtual de la figura, por cuanto sólo sería viable la defensa para los supuestos en que el pago se hiciera entre la emisión de las copias contempladas en el artículo 124 de la Ley 9459 y la interposición de la demanda ejecutiva, desconociendo todas aquellas cancelaciones efectuadas en un período anterior al plazo mencionado.

Luego, la cámara evaluó que la letrada demandante sostenía que de las constancias de la causa no surgía la existencia de un contrato de locación o de retribución periódica entre su parte y la empresa; que las facturas acompañadas no tienen la indicación sobre qué se deben imputar a la deuda reclamada y que el Presupuesto de Asesoramiento y Representación Jurídica fue negado por su parte.

Sin embargo, la alzada señaló que la actora reconoció las facturas acompañadas por la demandada al contestar la demanda y oponer las excepciones, derivando que de dichas facturas se desprende que fueron emitidas de forma periódica, por un monto sostenido a lo largo del tiempo.

Asimismo, la cámara advirtió una serie de órdenes de pago emitidas por la demandada, los cuales son documentos emitidos de manera unilateral, los cuales si bien algunos cuentan con la rúbrica de la letrada R., fueron desconocidos por ella, por lo que se constituyen solo en indicios que apuntalan la conclusión sobre la periodicidad de los pagos en tanto se correlacionan con las facturas emitidas.

El tribunal aclaró que la accionante, al contestar el planteo de las excepciones, no desconoció que dichos pagos fueron realizados sino que no surgía de ellos que se hubieran imputado a la deuda reclamada en el juicio.

Por otro lado, los camaristas señalaron que en la causa se contó con una pericia oficial contable, que concluyó que la letrada percibía en forma mensual honorarios de la empresa, existiendo facturas emitidas bajo su CUIT en concepto de honorarios que se le cobraban a la empresa demandada; y luego realiza un detalle de la facturación realizada por la actora.

Presupuesto

Por último, los vocales valoraron el Presupuesto de Asesoramiento y Representación Jurídica acompañado por la demandada y que, si bien es cierto que dicho instrumento carece de firma, no por ello pierde toda virtualidad convictiva, actuando en el caso de marras como un indicio más que se suma a los que se desprenden de los demás elementos probatorios ya valorados, y permiten tener por acreditada la existencia de un contrato de locación de servicios profesionales entre la actora y la demandada.

En esa dirección, la decisión precisó que del mentado documento surge que la abogada F. M. R. ofrecía realizar a favor de la empresa demandada tareas de asesoramiento y representación legal, la cuales incluían, entre otros puntos, servicios judiciales consistentes en la defensa de la empresa en todas las causas laborales que se iniciaran en su contra, sin límite en la cantidad de juicios, tanto en capital como en diversas sedes del interior.

Por consiguiente, el tribunal compartió con el sentenciante que el plexo probatorio de autos torna verosímil que la retribución periódica que recibía la letrada actora, incluía la actuación en juicios laborales como los que pretende ejecutar.

En consecuencia, en el fallo se resolvió que el acogimiento de la excepción de pago y el rechazo de la ejecución decididas por el Juez interviniente, lucen ajustadas a derecho, razón por la cual deben ser confirmadas, ordenando rechazar el recurso de apelación incoado por la parte actora, confirmando la resolución impugnada en todo cuanto ha sido materia de agravio.