Confirman sanción por destrato a un cliente que reclamó por zapatillas defectuosas

Revocan una sentencia que había dejado sin validez la multa impuesta por la Dirección de Defensa al Consumidor por la venta de un calzado sin brindar la información necesaria del certificado de garantía [privado]

La Sala Contencioso-administrativa del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) revocó una sentencia que había dejado sin efecto una sanción a Carlos Rossetti, titular de "Nike Shop", por no observar los requisitos mínimos de un documento de venta y certificado de garantía de un producto.

El Alto Cuerpo integrado por Aída Tarditti, Domingo Sesin y Luis Rubio analizó que el hecho en cuestión involucra infracciones a los artículos 10 y 14 de la Ley de Defensa del Consumidor (LDC). Respecto del primero, se sostuvo que, aun considerando que la reglamentación permite una abreviación significativa de los datos requeridos como imprescindibles, no puede sino concluirse que el instrumento en cuestión no alcanza a satisfacer las pautas mínimas establecidas por la normativa protectora del consumidor.

Los vocales resaltaron la trascendencia del débito informativo en el ámbito de la relación de consumo y en la funcionalidad del contenido del ticket y del certificado de garantía, calificando notablemente su importancia y relevancia en el sistema de protección apuntado, lo cual resignifica la gravedad de su incumplimiento.

En tal sentido, el TSJ añadió que de la lectura del ticket de venta resulta ostensible la carencia de una adecuada descripción del objeto.

Sobre el artículo 14 LDC, se indicó que exige que el certificado de garantía esté escrito en idioma nacional, con una redacción de fácil comprensión en letra legible, y determina con precisión su contenido mínimo.

Al respecto, el fallo apreció que la pieza ofrecida como copia de aquél por Rossetti carece de toda identificación de la cosa que garantiza, no cuenta con especificaciones técnicas para su correcta individualización y omite indicar las condiciones de uso, instalación y mantenimiento necesarias para su funcionamiento.

Los vocales resaltaron la trascendencia del débito informativo en el ámbito de la relación de consumo y en la funcionalidad del contenido del ticket y del certificado de garantía, calificando notablemente su importancia y relevancia en el sistema de protección apuntado, lo cual resignifica la gravedad de su incumplimiento.

Así las cosas, en el fallo se resolvió la validez de los actos administrativos de la Provincia, por lo que concluyó que correspondía hacer lugar al recurso de apelación interpuesto por la parte demandada y rechazar en todos sus términos la demanda interpuesta.

Finalmente, el TSJ dio visibilidad a la voz de la denunciante, Natalia Betina Jesús Aguirre, y destacó la trascendencia que reviste que la resolución judicial propicie una revaloración de lo que tenía para decir quien fue afectada en sus derechos por una conducta empresarial censurable.

Precauciones

En tal sentido, el TSJ expresó que la mujer comenzó describiendo las precauciones que asumió un mes después de la compra de un par de zapatillas, explicando que procedió a su lavado siguiendo las instrucciones de uso, con un trapo mojado y jabón neutro, aunque en una de estas pasadas se despintaban los ribetes dorados, lo que se agudizaba cada vez que repetía la tarea “con todo el dolor que me dio, porque no son nada baratas y con todo lo que me gustan estas zapatillas", según describió.

En esa dirección, el tribunal indicó que la denunciante detalló la diligencia con que se comunicó con la firma vendedora, explicando que llamó urgente a Nike Shop para hacer conocer lo que estaba pasando. La denunciante añadió que la atendieron y le respondieron que las llevara urgentemente al negocio, lo cual hizo.

La decisión agregó el relato que la mujer hizo de las gestiones que tuvo que realizar por el desperfecto del producto: el encargado del local le recibió las zapatillas, le pidieron un número de teléfono y le dijeron que la llamarían cuando el servicio de fallas de la franquicia determinara si se las cambiaban o no.

Según el fallo, la consumidora expuso que -como no la llamaban- llamó ella y fue atendida por el mismo encargado, quien le respondió que aún no habían tomado una decisión. Después de varios días sin novedades, finalmente el citado encargado la llamó para informarle que su reclamo no había sido reconocido y que pasara a retirar el calzado defectuoso.

Situación

Los vocales destacaron que la mujer asumió el esfuerzo de comentar la dolorosa situación emocional por la que estaba atravesando y cuestionó que no pudo disfrutar de la compra ni un mes: "Nunca en mi vida me había gastado tanto en comprar unas zapatillas pero ya que me gustaban tanto, tanto y que venía de un proceso doloroso de mi vida por la pérdida de un embarazo que psicológicamente me dolía el alma, mi marido me dijo que me comprara esas zapatillas que tanto me gustaban”.

Finalmente, el Máximo Tribunal cordobés subrayó que la accionante pidió a Defensa del Consumidor que escuchara todo lo que fue desoído por la empresa vendedora, propiedad de Rossetti, reclamo que motivó la sanción administrativa que se confirma.

En definitiva, el TSJ ordenó que esta decisión judicial que ratificó la sanción a la demandada le sea comunicada a la persona afectada, ya que, por no haber sido parte en este proceso de revisión de la sanción administrativa, pudiera resultar finalmente desinformada en la forma en que ha concluido.