El Gobierno les pidió que reduzcan 20% el déficit comercial del sector y que trabajen en la exportación de la producción local.
Pese a que muchas empresas suelen quejarse por “el intervencionismo estatal” -como ocurrió en la última conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA)-, lo cierto es que tras la crisis de finales de 2008 una buena porción de la recuperación manufacturera en el país se debió a la enérgica acción del Estado, ya fuera promoviendo el consumo o combatiendo la competencia desleal. Una nueva iniciativa del Ejecutivo parece ir en el mismo sentido y las principales beneficiadas pueden ser las autopartistas locales, pues se pretende reducir el déficit comercial generado por la entrada de automóviles extranjeros, fundamentalmente de gama media-alta.
La ministra de Industria, Débora Giorgi, y el secretario de Industria, Eduardo Bianchi, se reunieron la semana pasada con los representantes de la Cámara de Importadores y Distribuidores Oficiales de Automotores (Cidoa), a quienes les plantearon la necesidad de que se comprometan en reducir el déficit comercial en 20% el año próximo.
El Gobierno nacional requirió a los importadores que presenten un plan de importación de vehículos desde terceros países para 2011que implique una reducción de los valores importados este año, y que trabajen en programas de exportación de materiales y piezas producidos en el país, de manera de lograr una balanza comercial más equilibrada.
Por esa vía se busca, entonces, incrementar las ventas externas de autopartes, en momentos en que el sector está realizando importantes inversiones para aumentar el porcentaje de componentes nacionales de las unidades fabricadas en el país.
Este rubro manufacturero ya efectuó anuncios de inversiones por 1.800 millones de pesos este año, entre los cuales estuvieron los de Magneti Marelli, Mapsa, Fate, Pirelli, Denso, Faurecia, MA Automotive, Prestolite, etc.
De hecho, en comparación con 2008, este año el déficit comercial del sector se reducirá en 600 millones de dólares y en algunos de los últimos modelos anunciados por las terminales -Renault, Ford, Fiat y Peugeot, entre otras- se estima que la integración local llegará a 60%.
Los objetivos
– “El objetivo es equilibrar la balanza comercial con terceros países y avanzar en la integración de la cadena automotriz a nivel regional, de modo tal de profundizar el autopartismo argentino y brasileño”, dijo Débora Giorgi.
– Agregó que “se trata de preservar la producción regional frente a la sobreoferta mundial, fundamentalmente en lo que respecta a vehículos de gama media-alta