Por cambios en Ganancias, se derrumbó la coparticipación a Córdoba y hay alerta

Ingresaron $126.498 millones, “apenas” 120% más que un año atrás y 24 puntos porcentuales por debajo de la inflación. Un mes atrás, el alza nominal había sido de 139%. El nuevo escenario pone en serias dificultades a las finanzas provinciales, hasta ahora sustentadas por los giros nacionales y luego de 11 meses consecutivos de caída real de los ingresos propios

Los giros nacionales a Córdoba alcanzaron en octubre 126.498,5 millones de pesos, 120,37% mayores a un año atrás y unos 24 puntos porcentuales por debajo de la inflación minorista, suponiendo que en el mes pasado se ubicó en torno a 10%.

En cualquier caso, los datos -a los que tuvo acceso Comercio y Justicia a partir de información del Ministerio de Economía de la Nación- deja al descubierto finalmente cuál fue el verdadero impacto de las medidas tomadas por el ministro Sergio Massa días atrás y que incluyeron cambios en el impuesto a las Ganancias -votado luego por Ley- y la restitución del IVA para compras con tarjeta de débito, tema que también está en discusión en el Congreso.

Con todo, la baja real en la coparticipación obedeció básicamente al impacto de la suba del mínimo no imponible de Ganancias y no por el denominado Compre sin IVA. De hecho, ese último tributo, que -junto con Ganancias- explica el 90% de los envíos nacionales, mantuvo una buena performance.

“En el IVA seguramente se blanquearon más operaciones por ser pago digital”, explicó a este medio una fuente oficial, la cual -además- estimó que la proximidad de la elección llevó a que muchos consumidores adelantaran compras ante la eventualidad de una posible devaluación y posterior suba de precios luego de los comicios del pasado 22 de octubre.

Como fuere, la baja en términos reales de la coparticipación es un duro golpe para las finanzas de la Provincia de Córdoba.

Sucede que hasta el momento eran los giros nacionales los que venían sosteniendo la recaudación provincial con subas reales que, aunque cada vez más exiguas, eran claves para mantener los ingresos totales.

De hecho, en septiembre, la coparticipación creció 139% nominal y dos por ciento en términos reales.

La mejora de los envíos nacionales permitía por ahora neutralizar en parte la caída real de la recaudación de Rentas que hasta septiembre sumaba 11 meses de baja a valores constantes.

Los giros desde la Nación a Córdoba representan seis de cada 10 pesos que le ingresan a la Provincia producto de los recursos fiscales.

¿Y ahora?

La noticia, aunque esperada, no cayó nada bien en el Centro Cívico.

Es que la suba del gasto total, con erogaciones inelásticas a la baja como los salarios del sector público, por ejemplo, o bien determinados gastos sociales y la cobertura del déficit de la Caja de Jubilaciones que no es cubierta por la Anses, necesita de ingresos acordes que ahora muestran una defección preocupante.

El ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, prometió a las provincias que el impacto negativo de los cambios impositivos en Ganancias y en el IVA, serán compensados por modificaciones en el denominado impuesto al Cheque o en el PAIS, para que puedan ser coparticipados y así neutralizar la baja que generan las medidas dispuestas por el titular de la cartera económica.

El tema sería debatido en el marco de la discusión del proyecto de Presupuesto 2024 que recién comienza a ser tratado en comisión en la Cámara de Diputados.

Habrá que ver ahora con los datos concretos respecto a la caída real de la coparticipación a las provincias, si el Congreso avanza en las modificaciones prometidas por Massa.

El problema que recién sale a la luz con los números de octubre, será un tema que golpeará de lleno a la gestión de Martín Llaryora, que asumirá el próximo 10 de diciembre.

Con paritarias ya cerradas con el sector público con garantía para mantener el poder adquisitivo del salario, erogaciones en el frente social que exigen sostener recursos en un contexto de crisis que golpea a sectores vulnerables y un plan de obra pública que ni Schiaretti ni Llaryora pretenden desacelerar, habrá que ver qué medidas adopta la actual gestión y la siguiente para mantener la estructura del gasto y evitar caer en una situación de déficit financiero.