ESCUCHARLo indicó un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA). Se destacan las
modificaciones en los segmentos de Prevención, Control e Investigación en Patologías
de Salud, Relaciones con las Provincias y Asignaciones Familiares, entre otros
En el marco de las disposiciones que comunicó el Gobierno nacional para mitigar el impactoen la economía de la pandemia de coronavirus, se destaca una importante reasignación presupuestaria para sectores clave, de acuerdo con un informe difundido ayer por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
En ese documento se aseguró: “Los nuevos requerimientos que demanda la pandemia de Covid-19 modificaron las prioridades del gasto público nacional”. Asimismo se destacó que entre el 17 de marzo y el pasado jueves 2 se observó una importante incidencia de las decisiones de la Administración nacional en el gasto público.
En este sentido, los especialistas de la entidad precisaron: “Del total de las partidas que aumentaron en esta segunda mitad de marzo, sólo ocho partidas explican 80% del aumento del gasto. A ello se suma el sensible incremento de la ejecución en un puñado de partidas adicionales”.
En detalle, se duplicó el gasto en refuerzos alimentarios con eje en el territorio, considerando que las partidas destinadas a políticas alimentarias crecieron 132% en una quincena y los programas de abordaje territorial percibieron una suba de 128%. Vale señalar que esta decisión demuestra la importancia que tiene para el Gobierno la asistencia a los sectores más vulnerables que, según indicó CEPA, se encuentran prodominantemente en la zona metropolitana y del conurbano de Buenos Aires.
Por otro lado, creció 10,2% el monto destinado a asignaciones familiares, 48% los complementos a prestaciones previsionales y 2,5% el presupuesto de pensiones.
En tanto, los bonos a beneficiarios/as de programas sociales impactaron en 135% más de ejecución que en en el período previo al 17 de marzo. Al respecto, especificó el informe, “se puede identificar el pago del bono a beneficiarios de Programas Sociales, con una ejecución adicional de $7.035 millones en los últimos 15 días”.
Además, los bonos anunciados para fuerzas de seguridad, policías y gendarmería significaron 52,4% más de ejecución que en la etapa previa al aislamiento.
Mientras, el gasto en salud también registró aumentos entre el 21% y 27% en sólo 15 días. “Allí, la partida Prevención y Control de Enfermedades Inmunoprevenibles se incrementó en $4.060 millones (+27%)” y “adicionalmente, se observó un aumento en la partida Transferencias Varias del Ministerio de Salud, de $1.671 millones”, indicó el documento, a la vez que resaltó la importancia del incremento en las partidas de Atención Sanitaria para la Comunidad y Prevención, Control e Investigación de Patologías, en $892 millones y $1.693 millones respectivamente (incrementos de 17% y 137% en cada caso).
Finalmente, según precisó el análisis del CEPA, se duplicaron (+104%) los recursos que se giraron hacia las provincias y los municipios.
Al respecto de estos últimos puntos analizados por la organización, este domingo, el secretario de Equidad en Salud de la Nación, Martín Sabignoso, aseguró que «una pandemia sin precedentes requiere una inversión en salud sin precedentes», luego de que esa cartera transfirió más de 1.400 millones de pesos a las provincias para combatir el coronavirus.
En esta línea, Sabignoso aseguró que el objetivo es «fortalecer los sistemas de salud provinciales” y agregó: “Aumentamos las transferencias regulares en cinco veces más que el año pasado. Estamos inyectando recursos adicionales para enfrentar de la mejor manera la pandemia».
Además, el secretario informó que «con estos recursos se va a financiar la internación de la gente que no tenga obra social, tanto en lugares públicos como privados». «Nos estamos preparando de la mejor manera. La cuarentena nos permite desacelerar los contagios y nos da tiempo para fortalecer el sistema de salud», afirmó.
Déficit
Por otro lado, y en relación a los puntos abordados por el informe de Cepa, la consultora Ecolatina también emitió ayer un informe donde precisó el impacto que tendrán estas erogaciones extraordinarias en las cuentas fiscales del año.
“El shock del Covid-19 lo cambió todo: el plan de austeridad y persecución de un sendero fiscal consistente quedó en el olvido”, indicó el texto y agregó que, además, “la profundización de la recesión por la cuarentena reducirá aún más a los ingresos del Estado Nacional, que también sufrirán por las exenciones impositivas realizadas”. Así, se anticipó que “como resultado, el rojo fiscal se agrandará por mayores gastos y menores ingresos”.
“Aunque podemos pensar como lógica la decisión del Ejecutivo de priorizar la lucha contra la pandemia, sin acceso al financiamiento externo, la necesidad de reestructurar la deuda pública es cada vez más imperiosa (para no destinar recursos al pago de amortizaciones); por lo tanto, la mirada de los acreedores sobre las políticas del Palacio de Hacienda sigue siendo clave”, indicó el informe de la consultora privada.
En tanto, se precisó que hasta el momento, el programa integral para mitigar los efectos de la pandemia en la economía que lanzó el Gobierno implicará poco más de 2% del PBI, lo cual asciende a $600 mil millones y equivale a un tercio de la base monetaria promedio de marzo y la mitad del circulante.
En este escenario, Ecolatina estimó que “el rojo primario rondaría 2,5% del PBI este año -si no hay nuevas medidas ni se extiende la cuarentena”, y la autoridad monetaria deberá asistir al Tesoro con más de $700 mil millones.
