Córdoba alerta sobre las graves consecuencias económicas de la escasez de gas y gasoil

El ministro de Servicios Públicos, Fabián López, admitió a Comercio y Justicia respecto a los perjuicios que genera la falta de combustibles claves. “Hay sectores que ya están afectados y el panorama a futuro aparece aún más complejo”, dijo. Habló del incremento de costos de producción y hasta del parate de industrias. El viernes, cumbre con todos los actores involucrados. “Vamos a pedir precisiones y presionar para contar con el producto”

El ministro de Servicios Públicos de la Provincia de Córdoba, Fabián López, alertó sobre las serias consecuencias que generará en la economía en general la falta de gas y gasoil, además de los mayores costos en la producción en función de tener que recurrir a combustibles a un valor ciertamente más oneroso, siempre en caso de que esté disponible.

En ese marco, López cuestionó la política energética del Gobierno nacional que no avanzó en inversiones clave aun contando con los recursos para hacerlo.

En esa línea, citó como ejemplo los fondos recaudados por el impuesto extraordinario para las grandes fortunas que se dispuso el año pasado, parte del cual iba a destinarse a avanzar con la construcción de gasoductos, particularmente un ramal que trae el insumo desde la cuenca neuquina y que hubiera paliado en parte la necesidad de importar gas desde Bolivia que no sólo es más oneroso -de hecho, ahora a un valor aún incierto-, sino que además hubiese ahora llegaría en un volúmen inferior a lo requerido.

Como fuere, hoy la situación es crítica y queda en evidencia en las dificultades para conseguir gasoil en momentos en que la demanda se incrementa con motivo de la cosecha gruesa -clave para el ingreso de dólares- pero además también de gas.

Ese último punto es paradójico y habla de la situación que se atraviesa. Sucede que ese insumo habitualmente es un bien abundante que en todo caso escasea en el invierno, cuando crece la demanda del sector residencial, por definición ininterrumplible.

“En febrero tuvimos que generar con gasoil en la central Bicentenario”, graficó el ministro como para desnudar la seriedad del problema.

Respecto al gasoil, el faltante es claramente visible. De hecho, en el interior hubo estaciones de servicio que debieron racionar la cantidad de litros por cliente, aun en el canal minorista, admitió a este medio Gabriel Bornoroni, presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles.

“El problema es que, con los precios internacionales del petróleo ahora disparados por la guerra entre Rusia y Ucrania, las petroleras locales no quieren importar el combustible necesario para cubrir la demanda interna porque los números no les cierran. Deben pagar un precio externo que es largamente superior al valor al que luego deben venderlo en el mercado doméstico”, resumió.

En ese contexto, la situación no parece tener una salida inmediata. “El precio de los combustibles está hoy atrasado entre 32 y 35%”, aseguró Bornoroni.

Si el tema no se sincera, el desabastecimiento que ya se observa se va a profundizar aún más y en un momento clave por la cosecha, dijo.

Con relación al gas, el panorama no es muy diferente. “Con los precios internacionales en valores récord por la guerra y con una producción interna que no alcanza para abastecer la demanda, habrá que importar a precios sin precedentes”, explicó Bornoroni.

Encima, a esta altura, el Gobierno debería haber ya contratado una cantidad de barcos que transportan Gas Licuado de Petróleo (GLP) para asegurarse un volumen acorde a la demanda y eso aún no ha ocurrido.

“Con Alemania sin el gas ruso, toda la demanda de barcos está enfocada en ese destino, los precios se encarecen y el mercado te hace sentir la diferencia”, resumió Bornoroni.

Todos quieren precisiones

En ese marco, tanto Bornoroni como el Gobierno de Córdoba e incluso EPEC, las industrias y sectores agropecuarios intentan obtener precisiones con relación al panorama futuro respecto a la provisión de un insumo clave.

Por lo pronto, López confirmó que el viernes habrá una reunión plenaria convocada por el Gobierno y de la que participarán los expendedores de combustibles, el denominado Grupo de los Seis (la UIC, la Cámara de Comercio, de Comercio Exterior, de la Construcción, Fedecom y la Bolsa de Comercio) y la Mesa de Enlace, además de los transportistas de carga, entre otros.

“La idea es conocer la situación de cada sector y a partir de allí plantear de manera institucional ante la Nación cuales son los planes para solucionar el problema e intentar asegurarnos la llegada del insumo”, resumió López.

El tema no es sencillo. En la Provincia deslizan incluso que habrá que “meter el pecho” para intentar lograr cupos, ante una oferta que claramente será menor a la demanda.

Problemas en todos los frentes

La falta de combustible, tanto de gas como de gasoil, tiene impactos múltiples. Por lo pronto, respecto a la demanda para la cosecha, es indispensable contar con el diesel para mover la maquinaria operativa.

En paralelo, también el transporte de cargas requiere del insumo, lo mismo que el transporte de pasajeros.

Al mismo tiempo, las empresas generadoras eléctricas necesitan el combustible, ya sea gas o gasoil.

Según pudo conocer este medio, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) comenzó a abastecer con gasoil a las diferentes centrales térmicas. De hecho, para la central Bicentenario de la EPEC, enviaron 82 camiones. “Está claro que buscan que las usinas cuenten con stock para poder generar, aún con el mayor costo que implica generar con combustible líquido”, reveló un informante.

Sucede que, sin energía eléctrica, el panorama sería caótico para todos los sectores.

Asimismo, el problema también alcanzará al sector industrial.

En esa línea, Marcelo Uribarren, titular de la Unión Industrial de Córdoba (UIC), admitió que el tema es motivo central de preocupación en esta instancia.

“Si falta combustible, hay riesgo de parálisis para muchas empresas”, reveló.

En la misma línea, el ministro López dijo que la escasez podría incidir en una caída de la actividad económica. “Si hay empresas que no cuentan con combustible para producir, deberán suspender personal, por ejemplo. El panorama es decididamente complicado”, resumió el funcionario.

¿Y el biodiésel?

Por lo demás, una alternativa para suplir la falta de gasoil podría llegar por medio del biodiésel, producido a partir de la soja u otros productos agropecuarios. Las plantas que producen ese combustible están instaladas principalmente en Santa Fe.

“El aporte que puede llegar por esa vía es en algún sentido marginal”, reveló a Comercio y Justicia Manuel Ron, de Bio 4, una de las principales plantas de bioetanol de Córdoba.