El relevamiento reflejó también qué porcentaje de la fuerza laboral de las empresas trabajaba en forma remota antes del aislamiento obligatorio, durante la cuarentena y qué porcentaje lo hará cuando finalice el aislamiento.
El 48% de las empresas que operan en el país consideró que su productividad no fue afectada por el trabajo remoto de sus empleados durante la pandemia, e incluso un 15% cree que aumentó, de acuerdo con una encuesta de la consultora Mercer.
Para aquellos empleados que normalmente no trabajaban de forma remota, los principales gastos que las empresas están reembolsando o suministrando durante el aislamiento son: computadora (61%), teléfono celular (30%) y equipamiento ergonómico de oficina (28%), internet (12%), según el relevamiento.
En el corto plazo, en la medida en que las decisiones de distanciamiento social comiencen a flexibilizarse, las compañías prefieren: alentar a los empleados a trabajar de manera remota, pero esperando regresar a las oficinas cuando las condiciones sean seguras (54%). También, alentar a los empleados a trabajar en forma remota lo más posible, hasta fin de año (31%); el 8% espera que los empleados regresen al lugar de trabajo a menos que haya una razón válida que lo impida; un 6% estima dejarlo a decisión de los empleados y brindar apoyo según sea necesario y apenas el 1% prefiere requerir que todos sus trabajadores regresen a la oficina.