Los productos exportados por las pymes argentinas poseen un valor agregado superior al de las exportaciones de las grandes empresas. El 65% de las exportaciones se comercializa en países de América Latina.
Durante el último año, cinco por ciento del total de las exportaciones realizadas por la Argentina fue efectuado por parte de pequeñas y medianas empresas. A pesar de haber una larga cantidad de firmas dentro del mencionado cinco por ciento, éstas corresponden a sumas menores frente al restante 95 por ciento de las exportaciones realizadas por grandes compañías, en su mayoría productoras de bienes primarios.
Los datos surgen de un estudio realizado por sectoresonline.com que analiza la realidad de las pymes exportadoras y permite vislumbrar cuáles son las oportunidades que se presentan con vistas al futuro para estas empresas y, además, cuáles son las principales amenazas y las preocupaciones en el sector.
“Este porcentaje de participación se ha visto reducido en los últimos años. Sin embargo la caída no ha sido motivada por una disminución en las exportaciones de las pymes sino que se da en relación con el notable aumento en los precios de las commodities agropecuarias, que han motivado una mayor exportación de productos agropecuarios, que en general son comercializados por las grandes empresas”, puntualizó la consultora.
Con relación al resto de la región, esta participación en las exportaciones va a tono con lo que sucede, por ejemplo, en Brasil, donde las pequeñas y medianas empresas representan alrededor de seis por ciento de las exportaciones totales, o en Chile, donde dicho nivel alcanza tres por ciento.
Otra realidad se perfila en otras partes del mundo, donde el desarrollo de las pymes ha sido tradicionalmente superior al de Latinoamérica, con niveles sobresalientes de participación, tal como se puede observar en Europa -con Italia- o en Asia, donde se destacan Taiwán y Corea del Sur.
Valor versus tamaño
Según destaca el estudio, se puede ver claramente que los productos exportados por las pymes argentinas poseen un valor agregado fuertemente superior al de las exportaciones de las grandes empresas, cuyas ventas se concentran fundamentalmente en la soja y sus derivados primarios.
“Mientras tanto, las pymes argentinas se han visto abocadas a la comercialización al exterior de manufacturas con mayor valor agregado esencialmente en los rubros de aparatos mecánicos, productos farmacéuticos y plásticos, entre otros, consiguiendo participaciones superiores a las grandes empresas en determinados rubros como juguetes, accesorios textiles, material de transporte o calzado”.
Alcance regional
Otra de las tendencias que se puede ver con claridad es el alcance regional de las pymes argentinas. Sesenta y cinco por ciento de las exportaciones de este sector se comercializa en países de América Latina, porcentaje en el cual 21 puntos son explicados por las exportaciones a Brasil. El 35 por ciento restante es exportado al resto del mundo, una cifra muy inferior al porcentaje registrado en las grandes empresas, cuyas exportaciones hacia países extra regionales llegan a 61 por ciento.
Ello evidencia -completa el estudio- las dificultades logísticas y de competitividad que poseen las pequeñas empresas para acceder a mercados lejanos. “Dicha tendencia se ha profundizado con la crisis mundial y ha derivado en el incremento de las medidas proteccionistas, tales como la exigencia de certificados de calidad, que por sus elevados costos son de difícil acceso para las empresas más pequeñas”, ejemplifica.
Algunas amenazas
Con relación a las problemáticas de las pequeñas y medianas empresas, el contexto mundial ha visto incrementarse las barreras arancelarias luego de la crisis del año 2008; esto no sólo es un inconveniente al momento de buscar mercados internacionales donde insertar la producción sino que ha puesto en riesgo la participación en el mercado interno, redireccionando hacia Latinoamérica la producción de países asiáticos que previo a la crisis tenían su mirada puesta en otras regiones. Por otro lado, hay que destacar que muchas de las pymes argentinas están sometidas a la competencia de las importaciones, principalmente de las provenientes de China y Brasil.
“Los sectores textil y electrónico son los que más sufren la competencia de productos provenientes de China. Por su parte, el rubro automotor ha visto crecer fuertemente la presencia de unidades provenientes de Brasil en el mercado local, a lo largo de los últimos años”, advirtió sectoresonline.com.
Qué piensan los empresarios
En la óptica de los empresarios locales, la percepción de una mayor presión tributaria, la cual efectivamente ha ido en aumento en los últimos 10 años (en la actualidad la recaudación tributaria representa 26 por ciento del PIB, mientras que una década atrás significaba 18 por ciento), junto con el aumento de los costos, son las principales preocupaciones. Esto se ve parcialmente compensado con una depreciación nominal del peso, que de todas maneras no alcanza a frenar la caída en la competitividad, que afecta sin distinciones tanto pequeñas como grandes empresas.
“De todas maneras queda demostrado con los niveles de participación vistos en otros países, como es el caso de Italia, que si se apuesta a medidas de apoyo como el aumento del financiamiento y la coordinación entre el Estado y las instituciones privadas con el fin de eliminar barreras burocráticas, las pymes exportadoras pueden mejorar y alcanzar niveles de participación superiores a los actuales”, finalizó.