La Casa de Trejo aprobó una serie de recomendaciones prácticas para adaptar el proceso de enseñanza frente a distintos grupos de estudiantes discapacitados.
Reconocer la importancia de la ubicación del estudiante en el espacio áulico, permitir la utilización de dispositivos tecnológicos de apoyo, disponer de manera anticipada a las clases del material bibliográfico en soporte digital, proveer materiales táctiles de apoyo, optimizar la comunicación oral, borrar los contenidos del pizarrón de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha son algunas recomendaciones que figuran en un protocolo que la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) acaba de aprobar para asegurar el acceso igualitario a alumnos ciegos o de baja visión.
El Consejo Superior dio luz verde a diversas estrategias inclusivas que buscan garantizar el acceso, permanencia, avance y egreso de estudiantes discapacitados. Son, además, una forma de repensar las prácticas docentes, sus estilos, estrategias y recursos, y cuestionar prácticas excluyentes para algunos sectores de la población garantizando el acceso a la educación en igualdad de condiciones.
“En cuanto a las situaciones de evaluación, se recomienda: garantizar la disponibilidad de exámenes en soportes accesibles, incorporar la corrección de exámenes en soporte digital, utilizar signos que favorezcan la identificación de palabras, reconocer la importancia de la participación del alumno en los espacios de evaluación, incrementar el tiempo de realización de los exámenes, suprimir tablas y cuadros tratando de utilizar texto plano”, detallaron en la UNC con respecto a las recomendaciones para con las personas ciegas.
Asimismo, para los espacios de consulta deberán garantizar la accesibilidad y en cuanto al entorno recomiendan garantizar las condiciones de iluminación y disminuir la contaminación acústica.
Detalles
La iniciativa elaborada por la Oficina de Inclusión Educativa de Personas en Situación de Discapacidad de la Secretaría de Asuntos Estudiantiles también detalló actividades académicas para con las personas sordas.
El protocolo recomienda la incorporación de intérpretes de lengua de señas o intérpretes orales, garantizar condiciones óptimas de iluminación en los espacios de estudio, utilizar equipos de audio para amplificar el discurso oral, disponer anticipadamente de recursos didácticos en formato escrito, uso de recursos y materiales didácticos visuales y organizar el espacio para que todos los estudiantes puedan participar.
Para las instancias de evaluación, las recomendaciones para la inclusión de personas sordas incluyen: proporcionar información escrita sobre la modalidad, las consignas, los tiempos y espacios de examen, la incorporación de intérpretes de lengua de señas, incrementar el tiempo de realización de los exámenes, incorporar la defensa del examen escrito en lenguaje de señas y permitir la utilización de diccionarios de sinónimos.
Por último, se establecieron como modalidades de evaluación alternativas para los casos en que el estudiante no pueda realizar un examen final según las modalidades convencionales. Se podrá implementar examen domiciliario a libro abierto, el examen de opción múltiple en soporte digital y el examen a desarrollar en versión digital.