Peluquerías, centros de belleza y fisioterapia son lugares claves donde aparecen indicios físicos y relatos de alerta. Allí brindarán información a las mujeres
Golpes en el cuello, cortes en el cuero cabelludo, mechones arrancados y hematomas en distintas partes del cuerpo son indicios que suelen percibirse en las miradas y las charlas de peluquería, donde las mujeres cuentan lo que no se animan a decirle a nadie. O la vista atenta de esteticistas y kinesiólogos que advierten huellas de maltrato. Ambas situaciones, encauzadas con algunos consejos y sugerencias respecto de adónde dirigirse para encontrar ayuda en caso de violencia familiar, podrán ahora ayudar para alertar y combatir el flagelo.
Se trata de una iniciativa que propone a los profesionales que atienden esos espacios a sumarse a la lucha contra el maltrato. “Ya son diez los peluqueros que se están capacitando y convocamos a que se sumen más, junto a esteticistas y kinesiólogos. Ellos tienen una escucha atenta y están en contacto con el cuerpo”, explicó a Comercio y Justicia la psicóloga Ruth Ahrensburg, de la Asociación Con Voz, una entidad que atiende a víctimas de violencia doméstica.
El objetivo es formar agentes de prevención que colaboren en la instancia de detección de casos y puedan guiar a las mujeres para ser atendidas por especialistas. En Nueva York, ya funciona una experiencia similar de un programa, sólo con peluqueros.
La organización que lanzó el proyecto está compuesta por nueve psicólogos, un trabajador social, dos abogados, dos acompañantes terapéuticos y un grupo de voluntarios. Ellos reciben a las víctimas y tienen entre sus experiencias más “superadoras” la de formar “grupo de mujeres”.
“Los grupos (de víctimas) son un espacio muy saludable para la mujer con violencia familiar o con su pareja, son grupos sustentables en el tiempo donde se acompañan y comparten lo que les pasa”, agregó Ahrensburg y explicó que también se apoya con sesiones individuales.
“La violencia ha crecido en número de casos y en la gravedad del daño, no sólo físico y psicológico sino también de conductas denominadas ‘violencia invisible’, como lo son los silencios, manipulaciones y violencia económica. Aquí vienen víctimas que son mujeres de empresarios y comerciantes que trabajan a la par de sus maridos y no ven un sólo peso; eso, por ejemplo, es violencia invisible”, detalló. Para comunicarse con Asociación Con Voz, llamar a 4729242 o 4725023.
Jornada
Ahrensburg disertará el viernes en las Jornadas Herramientas y dispositivos para el abordaje en situación de violencia, organizadas por el Colegio de Psicólogos, que contarán en la apertura con la disertación de la especialista Eva Giberti. La jornada dura hasta el sábado y se desarrollará en el Interplaza Hotel .