ESCUCHARSe trata de una rutina “al revés” de la convencional. En el aula desarrollan proyectos y trabajan en equipo; en tanto, en el hogar hacen materias con videos y audios.
Como cada año, el New Media Consortium (NMC) ha hecho público el informe Horizon sobre las tecnologías a asumir para los próximos años en educación. Para 2015, cada vez más profesores utilizarán la modalidad de clase invertida.
“La clase invertida -describe la investigación- es un modelo en el cual los alumnos asisten a clases por medio de videoclases, audios y materiales interactivos desde su casa, mientras en la escuela se sacan las dudas y tienen tiempo para desarrollar proyectos y trabajar en equipo, rutina que es inversa a la adoptada por las instituciones convencionales”.
De acuerdo con el estudio, las clases invertidas han crecido debido al uso eficiente del tiempo dentro de la clase, lo que promueve una mayor interacción entre profesores y alumnos. Además, los profesores pueden usar los datos de las actividades online para planificar clases que atiendan a las necesidades del grupo.
El modelo promueve el autoconocimiento de los alumnos y los ayuda a desarrollar habilidades deseadas en el mercado laboral, tales como la capacidad de resolver problemas y argumentar con confianza.
El informe Horizon también indagó las tendencias y evolución de los cursos online en los años que vienen.
“La interactividad con el contenido y la mayor capacidad de contacto entre las personas permite que los cursos online no den la sensación de distancia. La posibilidad de entregar un trabajo en formato de video, por ejemplo, hace que puedas visualizar a tus compañeros y los veas como amigos comunes, iguales a los que conocerías en un curso presencial. Si bien antes esta falta de intimidad alejaba a muchos estudiantes, ahora eso dejó de ser un problema”, describe.
Más personalizada
La experiencia de los cursos online también mejoró en otros aspectos: ahora, la enseñanza a distancia es más personalizada. Algunas plataformas norte americanas crearon un sistema en el que la propia web puede evaluar el progreso del alumno a lo largo del curso y dar consejos para obtener un mejor desempeño.
Según NMC, las grandes universidades del mundo se están adhiriendo cada vez más a los beneficios de los cursos online y esta actividad sólo tiende a crecer. Esas universidades también cuentan con la ayuda de los propios alumnos para crear cursos que contengan diferentes puntos de vista. Con esto, ellos pueden elaborar videos y audios con un contenido lo más completo posible.
