Por Graciela Treber / Concejal Nuevo Encuentro
Es evidente que una de las cuentas pendientes del Gobierno nacional ha sido una política de promoción, apoyo y sustento destinada a las micro, pequeñas y medianas empresas. Desde el punto de vista de la política tributaria, éstas siguen siendo consideradas en un plano de “igualdad” con empresas de mayor envergadura.
La igualdad en este caso no significa equidad, ya que tratar como iguales a quienes no tienen las mismas condiciones y/o posibilidades se convierte rápidamente en discriminatorio e inequitativo.
Es preciso reconocer que a este respecto, últimamente, se han ido tomando en el ámbito nacional algunas medidas tendientes a revertir esa situación, pero éstas son aún insuficientes y está pendiente la facilitación del acceso al crédito para todo ese sector, acceso que continúa siendo aún hoy una utopía para la gran mayoría de empresas micro, pequeñas y/o medianas, a pesar de que son ellas las responsables de la mayor parte de la generación de empleo genuino.
En ese contexto, parece increíble que en el ámbito del municipio se descarten de plano iniciativas a ese respecto. El 10 de agosto pasado, la Comisión de Hacienda y Desarrollo Económico del Concejo Deliberante, por votación de la mayoría de los bloques (UCR, bloque de Olga Ruitort, PJ, Giacominismo), rechazó un proyecto de mi autoría que contempla un régimen de promoción industrial referido justamente a esos emprendimientos micro, pequeños y medianos a fin de incentivar su instalación en nuestra ciudad de Córdoba, y dar empleo a los cordobeses.
El proyecto consiste en una modificación del Código Tributario Municipal, estableciendo exenciones tanto en el impuesto Inmobiliario como en Comercio e Industria, para todas aquellas empresas micro, pequeñas y medianas que amplíen su capacidad instalada y/o incorporen personal por encima de determinado número, todo sujeto a las condiciones y los términos que establezca el Departamento Ejecutivo Municipal en su reglamentación.
El argumento central que pretende avalar el envío a archivo del proyecto es el conocido “recaudación que funciona no se toca” y esconde una total posición conformista, de mero carácter recaudatorio, negando a las herramientas de Política Tributaria su real función y yendo en contramano del rol fundamental que se considera desde los estrados nacionales que debe cumplir el Estado en la Economía, poniendo por otra parte como objetivo central de la política tributaria sólo las metas recaudatorias.
La actitud tomada con el mencionado proyecto parecería coherente si en el mencionado Código Tributario Municipal de nuestra ciudad de Córdoba no existiera ningún régimen de promoción industrial. La situación no es ésta; muy por el contrario, el mencionado régimen existe y beneficia exclusivamente a las empresas grandes.
El tema central es justamente discutir qué tipo de política fiscal se pretende seguir a este respecto y con qué objetivos, a fin de resguardar la recaudación pero sin renunciar a estas herramientas como instrumentos de política económica.