Las ventas en los establecimientos cordobeses subieron entre uno y tres puntos en agosto, un mes híbrido para el sector por el cambio de temporada. En algunos, las bajas fueron de hasta 12%. Por Laura Pantoja / [email protected]
Las ventas en los supermercados cordobeses se mantuvieron estables en agosto, uno de los meses más híbridos en este sector como producto de la estacionalidad o del cambio de temporada. En algunas firmas la situación se agudizó, mostrando una “normal” caída en comparación a julio.
Según un relevamiento realizado por Comercio y Justicia en tres empresas de supermercadismo local, las ventas reales superaron entre uno y tres puntos las de julio pasado, mientras que en comparación al año anterior, las superaron en un punto.
“No hemos tenido un impacto negativo en el consumo en tanto persiste la sensación de que la inflación se está desalecerando”, indicó el gerente general de Mariano Max, Juan Carlos Martín.
Por otra parte, agregó que tampoco ha habido un movimiento bruscamente ascendente en la compra, en tanto agosto es un mes híbrido. “En víspera de los primeros calores, los alimentos también se someten a un cambio de temporada. La gente está dejando de comprar la mercadería propia de invierno ( legumbres por caso) y se ajusta a consumir lo que tiene acopiado. Además, como tampoco ha llegado todavía en forma masiva la línea de productos light o dietéticos, propios del verano, el mercado está planchado”, explicó el referente.
Por su parte, Benjamín Blanch, de Buenos Días, coincidió con su par de Mariano Max, aunque apuntó que “ese comportamiento se acentuaría mucho más en septiembre” debido a que en agosto pasado “el frío todavía perduró”.
En relación con los productos que motorizaron el consumo, Blanch confirmó que la elección fue pareja tanto en los de primera necesidad como en el rubro bebidas, higiene u otros. Remarcó que el consumo de la carne continúa cayendo, al igual que en los meses anteriores, a pesar de que el precio, por ahora, está “planchado”.
Un comportamiento diferente ha tenido la cadena de supermercados Almacor, con 55 locales en toda la provincia. “En agosto se vendió 12% menos de unidades que en julio pasado, un indicador que resulta ser normal para estas fechas por una cuestión de estacionalidad. Además, se compara con julio, un mes cuando el consumo estuvo traccionado, en muchos casos, por los aguinaldos”, graficó Daniel Floridia, gerente comercial de la firma.
En comparación con el mismo mes del año anterior, la venta de unidades aumentó 7% en agosto de 2010. Si se tiene en cuenta la inflación acumulada, que en el caso de la firma asciende a 23%, la suba trepó a 30%.
Según Floridia, el alza está directamente relacionada con la reactivación económica, motivada por “una mejora” de la actividad en los distintos sectores industriales, en los salarios y en regulación del Gobierno de las asignaciones familiares por hijos.
La cadena comercializa los cortes de carne del Gobierno, por los que la venta de kilogramos ha aumentado 13% en relación con 2009, aunque su facturación cayó 6%. En lo que respecta a los cortes tradicionales, Floridia acuerda con Blanch en que la compra sigue disminuyendo. Por caso, Almacor vendió 15% menos de kilogramos por media red, que el año anterior.