Pese a que uno de los artilugios de las agencias de publicidad es utilizar famosos a la hora de promover las invenciones de sus marcas clientes, un estudio llevado a cabo por GfK para la revista Textilwirtschaft detectó que sólo una cuarta parte de los consumidores demanda rostros conocidos en las campañas de moda.
De los consultados, 83% prefiere que la publicidad de moda sea protagonizada por “gente normal” y no por famosos. Y 60% apuesta por los modelos profesionales en lugar de las celebridades.
Las preferencias del consumidor en la publicidad de moda se dejan notar también en las ventas. Sólo 12% de los ciudadanos entrevistados por GfK admite haber comprado en alguna ocasión una prenda de ropa por estar anunciada por un famoso o una famosa. Y no sólo eso: 36% de los consultados opina que las marcas que fichan a celebridades para sus campañas de publicidad pierden aceptación entre los consumidores.
A pesar de estos resultados, las marcas siguen “peleando” por tener en su staff a los hombres más famosos de Hollywood o del mundo deportivo. Rafael Nadal ha sido la última gran conquista de Armani, quien desplazó a David Beckham. Madona es otra de las más buscadas por las marcas, quien ha protagonizado una gran variedad de campañas que la pasaron por diferentes papeles, hasta el de una mujer lavando platos.
De Argentina, Lionel Messi, por su protagonismo internacional, es uno de los que más gana por estar en anuncios. Aunque a nivel puramente local personalidades como Ricardo Darín y Susana Giménez también han trascendido a la publicidad, como es el caso reciente del protagónico para celebrar los 100 años de Frávega. Darín también había sido la cara de Toyota, mientras que Natalia Oreiro es otra de las elegidas por las marcas.