Se trata de un edificio de alta gama que exigirá una inversión superior a 12 millones de pesos. Será centro de recepción para unos 1.200 visitantes mensuales, que impactarán en el comercio y la gastronomía de la zona.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días anunció la construcción de su primer templo del interior del país en Córdoba, en un terreno de 21 mil metros cuadrados ubicado en barrio Villa Belgrano.
El sábado pasado, autoridades eclesiásticas de rango mundial y nacional visitaron la ciudad y mediante un acto simbólico dieron la “Palada inicial” en el terreno donde se erigirá la obra, acompañados por autoridades provinciales y municipales.
Pero más allá del gran significado que cobra un nuevo templo para los mormones, que a diferencia de las capillas es el único lugar donde se pueden celebrar sus ordenamientos más sagrados, el hecho convierte a Córdoba en centro de recepción de turistas religiosos del interior del país.
“Así, fieles del NOA, de Cuyo y del sur del país, a quienes por distancia les quedará más cómodo venir a Córdoba que ir al templo de la ciudad de Buenos Aires, viajarán en excursiones para participar de sus ceremonias”, precisó a Comercio y Justicia Carlos Agüero, director regional de Asuntos Públicos.
Ómnibus cargados de familias, matrimonios y jóvenes vendrán todos los fines de semana desde diferentes provincias, además de los que viajarán durante la semana en forma particular. Según calcula, unas 300 personas se radicarán en la plaza por semana, con lo cual, al mes Córdoba podrá recibir a más de 1200 creyentes.
Esto, lejos de ser una oportunidad para que los operadores turísticos barajen nuevos paquetes de promoción, será un hecho que traccionará sin dudas el comercio y la gastronomía de Córdoba y, en particular, de la zona.
Al igual que el complejo religioso que la institución posee en Buenos Aires, camino a Ezeiza, éste contará con un hostal para albergar a una parte de los visitantes. Ubicado en el mismo predio, poseerá habitaciones con camas cuchetas, un salón de estar y una pequeña cocina.
El templo cordobés tendrá más de 2.400 m2 de superificie e incluirá un salón-capilla, dos salones de instrucción y numerosos salones complementarios que permitirán desarrollar la actividad religiosa.
Comenzará a construirse en enero del año próximo, tras la posterior demolición de la actual capilla que se levanta en el lote, la más antigua de las 48 que se dispersan en la ciudad.
Constará de un nivel en planta baja y un subsuelo y en su núcleo central se elevará como culminación de la torre una escultura del Ángel Moroni, de 29,70 m. de altura. Bajo el precepto de “dar lo mejor del pueblo para Dios”, la construcción será de “la más alta calidad que se pueda conseguir en la zona”, según cuenta Agüero. Presentará terminaciones de alta gama, como carpinterías exteriores con vitreaux, revestimientos de las fachadas en granito natural y detalles de terminación de jerarquía. Además, tendrá estacionamiento para 70 vehículos.
“Todo será de fina calidad, pero no estrafalario sino sobrio, para que conserve su don espiritual, reverente y lleno de paz”, añadió.
Con todo, se estima que la edificación demandará un inversión de más de tres millones de dólares a lo largo de dos años y, al parecer, será una de las más grandes de 2011.
El diezmo, un banco
La obra será financiada por la misma iglesia, cuyos ingresos devienen del diezmo de los fieles.
“Según la antigua y milenaria ley de diezmos, desde el más rico hasta al más pobre miembro de la Iglesia aporta voluntariamente la décima parte de sus ingresos, los que son administrados a nivel mundial por la máxima cúpula de la institución y sus asesores”, cuenta el director de Asuntos públicos.
Consultado sobre cuánto es el aporte total de los creyentes argentinos, Agüero respondió: “No sabría decirte, pero sí estoy seguro de que en Argentina no seríamos autosuficientes, con lo cual somos agradecidos de los hermanos del resto del mundo que pagan su diezmo mensualmente, porque si no sería muy díficil mantener la estructura”.
Y, sin dudas, el nivel de conciencia y compromiso de los fieles en este sentido deben ser muy alto, en tanto la Iglesia cuenta con estructuras en más de 176 países en todo el mundo. Son más de 14 millones a nivel mundial, 387 mil en Argentina y 22 mil en Córdoba, donde se reúnen en sus 48 capillas. Brasil y México son los países de Latinoamérica que más concentración de religiosos presentan.
En Argentina, mediante sus diez misiones -organizaciones ubicadas por zona geográfica, destinadas a evangelizar y atraer fieles a la Iglesia (los bien conocidos “hombrecitos de pantalón negro, camisa blanca y corbata negra que caminan por las calles predicando la “palabra de Jesucristo”), la Iglesia suma por mes 800 bautizados.
No obstante, a nivel mundial, según indica Agüero, el porcentaje de cristianos activos alcanza 30%.