La industria aceitera está en condiciones de pagar a los productores $190 más por tonelada de girasol, pero realiza un descuento para cubrirse del riesgo generado por las regulaciones de la Oncca.
Según informó la Sociedad de Acopiadores de Granos de Córdoba, con datos de la revista Infocampo, la capacidad de pago de las fábricas se ubica hoy en torno a $1.050 la tonelada, pero los valores ofrecidos -zona del puerto de Rosario- no superan los 860 pesos por el descuento que aplican. Este fenómeno se explicaría por la quita que aplican los industriales aceiteros para cubrirse del riesgo comercial generado a partir de las crecientes regulaciones exigidas por la Oncca -Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario- para poder concretar un embarque.
¨El precio local del girasol está muy divorciado de los valores internacionales por la complejidad existente en el actual escenario¨, señaló Enrique Erize, titular de la consultora Nóvitas.
¨Todas las cuestiones de reglamentación que implementó el Gobierno nacional en las últimas semanas fueron diseñadas para impedir el normal funcionamiento del mercado¨, comentó.
A partir de junio pasado el Gobierno nacional, a través de la Aduana, comenzó a restringir las ventas externas de aceite de girasol por temor a que se produzca desabastecimiento en el mercado interno. Las empresas afectadas fueron Oleaginosa Moreno, Nidera, Cargill, Molinos Río de la Plata, Aceitera Gral. Deheza y Vicentín.
¨En este momento no se están registrando trabas para realizar embarques de aceite de girasol; de todas formas, en el mercado existe incertidumbre porque se sabe que en cualquier oportunidad el Gobierno volverá a utilizar estos mecanismos¨, indicó ayer Carlos Sánchez Negrete, analista de mercados granarios e integrante de la Consejo Directivo de la Asociación Argentina de Girasol (Asagir). ¨El mercado de girasol está totalmente desvirtuado y las compensaciones dejaron de pagarse y esto va en contra de cualquier precio razonable que debería recibir el productor¨, añadió Sánchez Negrete.