A un año de la muerte de Valentino Blas Correo, el adolescente asesinado por un disparo policial, se concretó una marcha por justicia y contra el “gatillo fácil”. Desde Avenida Colón y General Paz, los participantes se dirigieron en silencio por el centro de la ciudad. “Nadie salió a hacerse cargo”, dijo la mamá del joven, Soledad Laciar.
En este contexto, familiares y amigos del joven pidieron justicia por el crimen y el fin de la violencia policial. “Hoy, mi lucha no es por Blas ni por los chicos que ya no están, sino por quienes sí están. Estoy levantando el nombre de mi hijo para que algo cambie. Con la muerte de Blas voy a tener que aprender a vivir, pero con lo que no quiero vivir es con un Gobierno sordo”, dijo la madre del joven asesinado.
“Pido que el Gobierno asuma las responsabilidades que le caben, en este caso y en tantos otros. Que asuma la responsabilidad que tiene sobre los policías que hoy están y que este Gobierno ha formado, a muchos de ellos desde el colegio. Porque acá no pueden hablar de herencias: es el mismo Gobierno de los últimos 22 años. Que asuman la responsabilidad de todo lo que hicieron en estos años”, continuó Soledad.