El jefe del bloque justicialista de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Leandro Busatto, le reclamó al procurador general de la Nación, Eduardo Casal, la creación de una Unidad Fiscal especializada en narcocriminalidad para que se haga cargo “de las causas más relevantes” de la ciudad de Rosario en esa materia, en el marco de la ola de violencia naco que atraviesa la ciudad.
El diputado le remitió un escrito a Casal para que se haga presente en Rosario “en (su) carácter de responsable del diseño y ejecución de la política criminal del Ministerio Público Fiscal, para explicar cuál es la estrategia en la investigación de la narcocriminalidad y los delitos que derivan de esa actividad”, informaron fuentes legislativas.
“No se está discutiendo la importancia de su rol”, sostuvo Busatto, pero añadió que “para combatir el narcotráfico se necesita de una articulación y coordinación que hoy no existe”.
El diputado peronista le pidió al procurador “que contemple la inmediata designación de un cuerpo de auxiliares fiscales para que sean distribuidos entre las distintas fiscalías federales de nuestra provincia con el propósito de dotar de mayor eficacia y eficiencia la persecución e investigación del narcotráfico”.
Para Busatto, su propuesta requiere de una “decisión que Casal puede tomar ya, sin acuerdo del Senado”.
La Unidad Fiscal especializada “debe estar bajo la órbita de un fiscal federal con trayectoria, y su función principal debe ser supervisar y coordinar la actuación de los fiscales que lleven adelante las causas más importantes”, agregó.
En esa línea, sostuvo que la Unidad “se haría cargo de las causas más relevantes de narcocriminalidad en Rosario” y evaluó que “no puede ser que no exista articulación de esas causas”.
“Si en muchas de ellas se repiten nombres y organizaciones, se necesita abordarlas de manera coordinada, no individualmente”, concluyó.
La ola de violencia narco en Rosario recrudeció la semana pasada con el ataque a un supermercado perteneciente a la familia de Lionel Messi, y el asesinato de Máximo Jerez, un niño de 11 años que recibió un disparo en la espalda y murió en la madrugada del domingo.
El niño participaba junto a sus tres primos -que permanecen internados-, de un festejo de cumpleaños en la vereda de un kiosco en el barrio Los Pumitas, la zona más humilde del barrio Empalme Graneros, en el noroeste de Rosario.
Máximo es el cuarto niño asesinado desde el inicio de 2023 en la ciudad de Rosario y localidades vecinas, dentro de una lista de 64 homicidios en 66 días.