Indemnizan a damnificada por el derrumbe que provocó una cañería de agua

Aguas Cordobesas debe responder por los daños que sufrió una mujer que cayó en un pozo, socavado por el ducto roto, mientras caminaba por una vereda de barrio 1º de Mayo El Juzgado en lo Civil y Comercial de 40ª Nominación de Córdoba admitió una demanda por daños y perjuicios entablada en contra de Aguas Cordobesas SA, al considerar a la empresa responsable por la caída en un pozo de una mujer. La demandante se lesionó cuando se desmoronó una vereda por la transitaba y, según estableció el tribunal, el siniestro ocurrió por la rotura de un caño de agua. [privado] Sin embargo, en el fallo se rechazó la demanda en contra de la Municipalidad de Córdoba, ya que hasta el momento del derrumbamiento súbito, la vereda se encontraba en “buen estado” de conservación. El juzgado relató que Yolanda Bulacio manifestó que con fecha 22 de diciembre de 2012, aproximadamente las 11.30 horas, caminaba por la calle Junín al 5265 de barrio 1° de Mayo. En ese momento “en forma súbita e intempestiva” una gran parte de la vereda cedió bajo sus pies y la mujer cayó en un pozo de aproximadamente un metro y medio de profundidad. La demandante quedó atrapada entre los escombros y las baldosas y debió ser auxiliada por los vecinos del lugar, quienes, luego del siniestro le brindaron primeros auxilios hasta la llegada de un servicio de emergencia médica. La damnificada relató que por calle referida corría un caño perteneciente a una red troncal de provisión de agua potable, explotada por la demandada Aguas Cordobesas y que, luego de su accidente, se hizo presente en el sector personal de la firma y procedió a realizar “arreglos” y tareas de reparación en dicha cañería. Para el tribunal, ello hacía presumir que el ducto estaba roto dejando filtrar agua hacia el resto de la calzada, “produciendo una merma de la capacidad portante del suelo generando que este cediera en el momento mismo en que la mujer pasó por el lugar”. El juez Alberto Julio Mayda, al analizar la responsabilidad municipal y después de valorar la prueba rendida, señaló: “Se corrobora que la demandada Municipalidad de Córdoba no incumplió sus obligaciones de mantener en condiciones de seguridad la vía pública, dado que la misma se encontraba en buen estado de conservación previo al siniestro y por tanto, no se ha acreditado una relación de causalidad adecuada entre el incumplimiento de la obligación y el daño producido, por tanto, corresponde rechazar la demanda en contra de la Municipalidad de Córdoba”. Constancias Sin embargo, respecto de Aguas Cordobesas SA el juez indicó que de las constancias de autos se desprendía una presunción de que el daño provino de un caño perteneciente a la empresa demandada, y agregó que las declaraciones testimoniales ratificaban esa mecánica. “Conforme fuera señalado, la vereda se encontraba en buen estado y se produce un hundimiento de la misma”, consideró el magistrado. Además, agregó que conforme a las pruebas relacionadas, la actora probó que el daño fue provocado por el vicio de la cosa –caño roto-, y la accionada Aguas Cordobesas no aportó elementos probatorios suficientes que descalificasen las afirmaciones comprobadas por la contraria. Así, el sentenciante concluyó que se ponía de manifiesto la culpabilidad de la demandada Aguas Cordobesas SA y la consiguiente obligación de resarcir el perjuicio ocasionado. Luego, al analizar los rubros indemnizatorios reclamados por la actora, el juez sostuvo teniendo en cuenta lo dictaminado por la pericia médica oficial no cabía apartarse de esas conclusiones, por lo que debía ser admitido el porcentaje de incapacidad allí consignado en relación a la cicatriz de la pierna de 4%. Por ello, haciendo uso de la fórmula Marshal y según los ingresos económicos de la accionante como empleada doméstica el magistrado obtuvo el monto a indemnizar por lucro cesante: $12.627,22. “Por la propia futuridad del rubro, los intereses se computarán desde la fecha de la presente sentencia hasta el efectivo pago”, agregó el magistrado. Finalmente, respecto del rubro daño moral reclamado, en la decisión se sostuvo que el monto reclamado por este concepto era de $15.000. “Si se tiene en cuenta que la accionante sufrió una incapacidad parcial y permanente de 4% de la total obrera, con las curaciones que ello demandó, la incertidumbre acerca de la evolución de las lesiones y la aflicción y temor provocados por el accidente, la suma pretendida por este rubro aparece ajustada a derecho”, relató el juez. Al respecto agregó que, por tratarse de mora ex re, los intereses debían computarse desde la fecha del hecho (22/12/2012), hasta el efectivo pago. Autos: "BULACIO, YOLANDA C/ MUNICIPALIDAD DE CÓRDOBA Y OTRO – ORDINARIO – DAÑOS Y PERJ. – ACCIDENTES DE TRÁNSITO – EXP. N.° 5 804 311” [/privado]

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