Admiten extender condena laboral a fiduciario de un fideicomiso inmobiliario

La decisión entendió que las normas aplicables hacen solidariamente responsable al codemandado, por no controlar la registración del empleado de la construcción demandante

La Sala Laboral del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (TSJ) admitió el recurso deducido por la parte actora y extendió la condena establecida por el a quo en contra del codemandado, en calidad de fiduciario del fideicomiso inmobiliario “Lake Towers”, para el cual el accionante se había desempeñado como operario de la construcción, ya habiéndose condenado a su empleador y solidariamente al contratista “Burj Desarrollos Inmobiliarios SA”, por no haber cumplido con la inscripción del empleado.

El tribunal hizo lugar a la demanda por rubros derivados de la relación laboral que el demandado Juan Francisco Vinay tuviera con Pablo Salinas y responsabilizó en forma solidaria a la empresa contratista, pero la rechazó en contra del fiduciario Juan Mariano Mendizábal, de “Lake Towers”, bajo el argumento de que no fue traído a juicio en forma personal ni invocado como solidario conforme la Ley de Contrato de Trabajo (LCT).

Previamente, el a quo refirió al artículo 16 de la ley 24441 e indicó que los bienes particulares del fiduciario no pueden ser afectados “por las obligaciones contraídas en la ejecución del fideicomiso, las que solo serán satisfechas con los bienes fideicomitidos”.

Agravio

El actor se agravió por el rechazo de la pretensión en contra de Mendizábal, aludiendo que el a quo incurrió en una errónea interpretación de lo establecido por los artículos 1, 14, 15, 16 y 18 de la entonces vigente ley 24441, pues no lo demandó a título personal sino en su carácter de fiduciario, argumentando que por ello, es el legitimado pasivamente para ejercer acciones tendientes a proteger el patrimonio fideicomitido.

El accionante expuso además que Mendizábal es el deudor por las obligaciones del fideicomiso y único responsable por la omisión de ejercer el debido control que impone el artículo 30 LCT a las accionadas y además, por ser el titular fiduciario del inmueble en el que trabajó el accionante.

A su turno, el Alto Cuerpo integrado por los vocales Mercedes Blanc de Arabel, Luis Enrique Rubio y Luis Eugenio Angulo , al analizar la cuestión indicó que, de los dispositivos en juego, en particular del artículo 18, de la entonces ley 24441 se desprende que es el fiduciario quien se encuentra legitimado para ejercer las acciones pertinentes en defensa de los bienes fideicomitidos frente a terceros y en tal carácter fue demandado, indicándose, además que era el titular o propietario del inmueble, en el cual Salinas se desempeñó como trabajador de la construcción.

Interpretación

Asimismo, el fallo consideró que si otra interpretación pudiera caber en orden a la mención de los artículos 30 y 31 LCT por el actor, resulta, de aplicación el principio iura novit curia, remarcando que la conclusión a que se arriba encuentra respaldo en el Código Civil y Comercial de la Nación, en sus artículos 1673 y 1674.

Luego el TSJ precisó que el a quo, en función de la incomparecencia de los accionados en la instancia administrativa y posteriormente a lo largo de todo el proceso judicial, por aplicación de presunciones legales derivadas de las incontestaciones de demanda y confesionales fictas, estableció que el actor trabajó en la obra en construcción “Lake Towers”, bajo las órdenes de Juan Francisco Vinay, quien había sido contratado por “Burj Desarrollos Inmobiliarios SA”, en categoría Oficial del CCT 76/75, desde el 23/03/11 hasta el 28/07/11, en que se consideró despedido indirectamente por exclusiva culpa de sus empleadores.

Excepción

El Alto Cuerpo agregó que hizo lugar a los ítemes reclamados, con excepción de la integración del mes de despido, horas extras, indemnización artículo 19 de la ley 22250 y las sanciones de los artículos 80 y 132 bis de la LCT.

Así, se consideró que la condena de los rubros acogidos procedió en forma solidaria para Vinay y “Burj Desarrollos Inmobiliarios SA”, esta última en virtud de lo dispuesto por el artículo 32 de la ley 22250, por lo cual se concluyó que se impone la extensión de la condena en forma solidaria en contra del fiduciario, con el alcance que impone la normativa vigente al tiempo de los hechos de la causa y por los rubros antes relacionados.

Autos: “Salinas Pablo Sebastián c/ Vinay, Juan Francisco y Otros - Ordinario - Despido” Recurso de Casación, 3245286, Trib. de origen: Cám. Trab., Córdoba, Sala III

El fallo Descarga

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