El Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) consideró que los créditos ofrecidos por el Gobierno nacional para reactivar distintos sectores de la economía, implican un subsidio desde los actuales y futuros jubilados hacia las familias y empresas que accederán a los préstamos.
La consultora analizó la propuesta de créditos baratos impulsada por el Estado. Éstos se financian con los ahorros previsionales con que cuenta la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), a una tasa del 11%, inferior a la de mercado. De todas maneras, los bancos que acceden a esos fondos están prestando a una tasa promedio del 14% anual.
Según Idesa, el Gobierno busca generar una oferta de créditos con condiciones preferenciales en favor del deudor, “pero el aporte más decisivo a estos créditos lo hacen los ahorros previsionales porque reciben una retribución inferior a cualquier otra inversión hecha en condiciones de mercado”, sostiene.
De acuerdo con estas estimaciones, dado que la tasa promedio de plazos fijos mayoristas vigente en la actualidad es cercana al 19% anual, el mecanismo implementado por el Ejecutivo nacional implica una pérdida para los jubilados de 80 millones de pesos por cada 1.000 millones asignados a créditos, por diferencial de tasas (11% contra 19%)