ESCUCHARLa medida entrará en vigor mañana. Pretende que ingresen al sistema formal alrededor de US$1.000 millones hasta fin de año, los que de otra manera se van al mercado paralelo. Será menos burocrático que intentos previos
El Gobierno pondrá en marcha esta semana un mecanismo para acelerar la formalización de los gastos de turismo de visitantes del extranjero en el país y por el cual buscará sumar US$1.100 millones a las reservas del Banco Central. Espera, de ese modo, achicar la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el paralelo.
El nuevo dólar turista para extranjeros funcionará para cualquier gasto que un visitante no residente realice en el país con una tarjeta de débito y crédito emitidos por una entidad financiera del exterior. A grandes rasgos, le reconocerá al turista el doble de pesos que le reconoce en la actualidad.
Hay que recordar que, con la regulación actual, cuando un turista pasa su tarjeta para hacer compras en el país, sus dólares valen unos $163 por unidad. A partir del viernes, con la entrada en vigor de la nueva medida, dicho turista necesitará menos divisas para pagar esa cuenta, ya que sus dólares tendrán un valor equivalente al MEP, que ayer cotizaba a 291 pesos.
Ese tipo de cambio diferencial surgirá por una ventana que habilitará el Banco Central a las empresas procesadoras de pagos con tarjeta para que la obligación de liquidar las divisas que les ingresen a los 5 días de recibidos, por ejemplo, por esa operación de ese turista extranjero mencionada antes, podrán hacerlo a un precio de Dólar Bolsa en lugar del tipo de cambio oficial.
De esta forma, el Gobierno trata de simplificar una operación que en gestiones anteriores se habían propuesto resolver con intrincadas formulaciones burocráticas. Con este nuevo esquema, ni el visitante, ni el comercio, ni los operadores turísticos locales deberán hacer trámites o ir a una caja de un banco a cambiar sus divisas por pesos.
La cuestión del ingreso de divisas de turistas extranjeros al mercado formal de cambios representó un problema real para la escasez de divisas que experimenta el Banco Central. De acuerdo con cálculos de la misma cartera de Economía, en el último año se estima que hubo unos US$2.500 millones de gasto de turismo receptivo, pero que sólo US$375 millones terminaron por alimentar las reservas de la autoridad monetaria, apenas 15% del total.
Por eso mismo, en el Gobierno estiman cuántos serían los dólares “potenciales” que podrían ingresar al Banco Central. En la autoridad central creen que el turismo receptivo podría, si esta medida prosperase, representar un ingreso de entre US$200 millones y US$250 millones mensuales, mientras en la actualidad ese promedio es de US$30 millones. En el equipo económico, de todas formas, son optimistas para lo que resta del año y arriesgan que podrían entrar unos US$1.100 millones, una cifra considerable para la frágil situación de reservas.
Si bien los turistas y los comercios no tendrán que realizar ninguna operación especial en el marco de este dólar nuevo para el turismo receptivo, el Gobierno ya le avisó a las operadoras turísticas que solo podrán ofrecer este tipo de cambio más alto a sus clientes externos en caso de que cumplan el acuerdo de precios que el Ministerio de Turismo alcanzó con cámaras sectoriales a fines de agosto, cuando se anunció el nuevo Previaje 3. “Si detectamos un CUIT que viola este acuerdo de precios, pierde el beneficio”, advirtieron desde el Ministerio de Economía, tratando de coordinar políticas en lugar de probar alquimias inconexas.
En caso de ser exitosa, en el Palacio de Hacienda esperan que esta medida contribuya con una mayor recaudación de impuestos por una formalización mayor de la actividad y a una reducción de la brecha cambiaria, por haber una oferta mayor en el mercado de dólar Bolsa que descomprima la demanda.
Desde el ministerio que conduce Sergio Massa también esperan achicar el déficit de la balanza turística, ya que en lo que va del año los residentes argentinos gastaron US$4.616 millones en concepto de “Viajes y otros pagos con tarjeta”, un monto significativamente superior que los US$ 375 millones que ingresaron formalmente al país en el mismo período por la tendencia de
Finalmente, como buena parte de la economía es una cuestión de expectativas y percepciones, desde el gobierno pretenden evitar escenas de pagos de restaurantes con decenas de billetes, tal como se vio en las redes en las últimas semanas.
