El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, consideró que la fuerte caída interanual que registró la balanza comercial del país durante septiembre último “se debe pura y exclusivamente” a las importaciones de combustible.
“Si nosotros tuviéramos autoabastecimiento energético, esto no sucedería”, sostuvo el funcionario, al opinar sobre las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) que indican que la balanza comercial de septiembre registró un leve superávit, de 65 millones de dólares, que representó una caída de 87% respecto de igual mes de 2014.
En los primeros nueve meses del año el saldo acumulado del intercambio comercial es de 1.551 millones de dólares, lo que representa una baja de 72,3% respecto de los 5.615 millones que registraba en el mismo período del año pasado, según la información oficial.
En declaraciones a la prensa, destacó que “solamente con la incorporación de Atucha II ahorraremos 400 millones de dólares (en importación de energía); por la sola incorporación de Atucha II y seguramente con Aguas Negras son otros 250 millones de dólares; con la Central Río Turbio serán unos 200 millones”.
Y añadió: “Así se va achicando el gasto que tenemos por traer combustible del extranjero para poder sostener nuestras centrales”.
El funcionario explicó: “si nosotros pudiéramos tener un abastecimiento de gas propio, sin inconvenientes, bajaríamos el costo (de importación) y tendríamos superávit fiscal”.
Además, Fernández explicó que la balanza comercial “está ligada a la relación con nuestros socios, y de ellos con los países centrales. Todo, en un mundo que no pasa un buen momento”.
“Si los países no compran, nosotros nos vemos -por carácter transitivo- en complicaciones más que claras respecto de los movimientos de productos a colocar en el extranjero. Pero hay que seguir buscando mercados y posibilidades”, concluyó.
En otro orden, Fernández defendió las alianzas estratégicas “con cualquier país que esté dispuesto a invertir” aquí, como China y Rusia.
“La alianza no es con Rusia, la alianza es con cualquier país que esté dispuesto a invertir en la República Argentina, el que tenga esa vocación será bien recibido y tomado en serio como corresponde”, enfatizó el funcionario. Y resaltó: “Si hay otro país que tenga ganas de poner dinero, bienvenido sea, puede ser Estados Unidos o cualquiera”.
Fernández señaló asimismo que “en algún momento se hablaba de que había relaciones carnales con los Estados Unidos. Hoy, la balanza comercial con ese país y con China es más o menos parecida, entre 5,5% y 6% del Producto Bruto Interno”.