ESCUCHARMás de 50.000 hectáreas de soja y maíz sufrieron daños totales en la zona de Pampa de Pocho, en el valle de Traslasierra, que posee una vasta área productiva dedicada a la producción de cultivos estivales.
Por ese motivo, un grupo de productores de la región realizó una movilización en la rotonda de acceso a la localidad de Mina Clavero, en reclamo por ayudas y soluciones por parte de los Gobiernos provincial y nacional, ya que la helada del pasado sábado fue el golpe de gracia de una campaña para el olvido.
En un comunicado, la Sociedad Rural Pampa de Pocho afirmó que desde que comenzó la temporada, han sufrido seis “plagas”:
1) Langostas
“Ninguna comuna ni municipio tenia personal capacitado para manipular productos para fumigar esta plaga, se tuvo que capacitar operarios”, criticó la Rural del oeste cordobés.
2) Sequía
Esta zona sufrió la falta de lluvias que sacude a gran parte del país. Y según la entidad, la principal afectación ha sido la fuerte reducción del stock ganadero en la región.
3) Incendios
Vale la pena recordar el episodio del 25 de noviembre pasado, por el que se estima que se quemaron unas 350.000 hectáreas de monte y bosque nativo.
4) Granizo
El 12 de enero pasado, cientos de hectáreas de cultivos y campos naturales sufrieron fuertes daños por las piedras que suelen afectar a la provincia en verano.
5) Helada
Fue el golpe final: pérdidas totales en 30.000 hectáreas de maíz más 20.000 hectáreas de soja, lo que suma alrededor de US$34 millones perdidos por los productores. Si se toma una cotización de dólar blue de $380, la suma asciende a $12.920 millones, a lo que hay que agregar la perdida de pasturas naturales, “cuyas pérdidas no pueden ser contabilizadas”, lamentó la Rural de Traslasierra.
6) Estado
Para la entidad, el sector público también es una “plaga”, porque “se lleva el 80% de las utilidades”.
DESASTRE AGROPECUARIO
Bajo este panorama, la Sociedad Rural Pampa de Pocho también sumó una serie de pedidos y reclamos.
Entre ellos, sobresale la solicitud de que la Provincia declare el desastre agropecuario, disponga financiamiento para productores y comerciantes, y establezca el no pago de impuestos por los próximos dos años, “ciclo que va a llevar en condiciones normales volver a producir”.
Asimismo, ante la importancia que están adquiriendo los fenómenos climáticos extremos, se demanda avanzar en un seguro multiriesgo.
