La presidenta Cristina Fernández firmó el proyecto para estatizar el sistema de jubilación privada y negó rotundamente que sea para quedarse con una “caja” de fondos en medio de la crisis internacional, tal como se advirtió desde varios sectores. El proyecto irá al Congreso, donde el oficialismo confía en que podrá imponer su mayoría.
Al encabezar un acto en la sede de la Anses, la Presidenta recordó que en la crisis del 2001 el Estado “tuvo que hacerse cargo de todo el desmanejo de políticos en las cuales se presuponía que el mercado y la teoría del derrame llegaría a todos”.
Y agregó que frente a un contexto internacional “donde los principales Estados están adoptando una política de protección hacia bancos, en este caso nosotros elegimos proteger a nuestros jubilados y trabajadores”. Por otra parte, el Gobierno prometió que el Estado nacional, a través de la Anses, absorberá a los 11 mil trabajadores de las AFJP que se quedarán sin trabajo por la estatización del sistema.
En otro orden, el titular de la Anses, Amado Boudou, rechazó las denuncias sobre un intento de “saqueo” por parte del Gobierno nacional al estatizar el régimen de capitalización, formuladas desde la oposición. “Hubo saqueo, pero fue la instauración misma del régimen de capitalización en la Argentina”, dijo Boudou. Por culpa del sistema de AFJP “los argentinos nos endeudamos en 100.000 millones de dólares adicionales, que sin ese saqueo no hubiese ocurrido”, sostuvo Boudou. “Con este nacimiento venimos a dar por terminado el experimento fracasado del régimen de capitalización”, dijo Boudou.
El funcionario también calificó de “ficción o ilusión” a la situación de los argentinos que tienen sus aportes en las AFJP y advirtió que “si tenían 20 mil pesos y hoy se tuvieran que jubilar, recibirían 120 pesos de jubilación. Es el triste golpe que anula cualquier ficción”.
No obstante reconoció que “nuestro nuevo sistema va a reconocer a aquellas personas que han estado aportando a una AFJP el mismo monto que si hubieran aportando al sistema público de reparto”.
Se difundió también que se creará un cuerpo legislativo encargado de seguir el destino del dinero luego del traspaso al Estado; el Gobierno busca que allí participen representantes de la oposición.
Los Gobiernos saquearon el sistema |
Si el sistema privado que “se expuso como idea” fue “porque el de reparto fue saqueado durante 50 años por todos los gobiernos de turno”, sostuvo el defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, quien admitió estar de acuerdo con “un sistema de seguridad social público”, aunque reclamó que el mismo tenga “un fuerte control social”. Semino consideró que el régimen de AFJP “fue un fracaso”. Y señaló que un sistema jubilatorio público “requiere un código de la seguridad social, un pacto institucional de todas las fuerzas políticas y un fuerte conocimiento y consenso social”. |