El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, denunció que 62 periodistas fueron asesinados en 2020 “sólo por hacer su trabajo”.
El dato surge de los registros que lleva la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Guterres señaló que muchos perdieron la vida cubriendo conflictos, pero aclaró que en los últimos años el número de trabajadores de medios muertos fuera de zonas de conflicto aumentó.
El secretario general agregó que “en muchos países, investigar la corrupción, el tráfico, las violaciones de derechos humanos o asuntos medioambientales pone en riesgo la vida de periodistas”.
En esa línea, lamentó que la impunidad sea “extremadamente alta” y reveló que la información de la Unesco muestraa que casi nueve de cada 10 casos queda sin castigo.
“Los periodistas hacen frente a innumerables amenazas, desde secuestro, tortura y detención arbitraria hasta campañas de desinformación y acoso, especialmente en la esfera digital”, agregó, y valoró que se trata de crímenes tienen un impacto enorme en la sociedad porque “evitan que la gente adopte decisiones informadas”.
“La pandemia de covid-19 y la pandemia de desinformación han demostrado que el acceso a los hechos y la ciencia es literalmente un asunto de vida o muerte”, agregó.
En la misma línea, la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, resaltó que, para muchos periodistas, “decir la verdad tiene un precio”.
Además, enfatizó que los Estados tienen la obligación de proteger a los periodistas y de garantizar que los responsables de sus crímenes seas castigados.
Azoulay apuntó al rol de jueces y fiscales “a la hora de promover procedimientos penales rápidos y efectivos”.