Volkswagen lanzó hace pocos años, con el Bettle, la moda retro en los autos. Al exitoso escarabajo remozadode VW, le siguieron varios modelos de marcas famosas, el último de los cuales fue el “cincuecento”, el popular Fiat 600 que llegará pronto a Argentina.
Sin tomar aún la decisión, en la francesa Citroën ronda también la idea de reflotar el viejo 2CV. En Argentina, la escuela técnica ORT lleva a cabo desde hace meses el rediseño de un 2CV a escala real. Los autores del proyecto piensan presentar el prototipo a Citroën para materializar el diseño en un automóvil de la marca. Los responsables definieron al 2CV como un auto hecho por gente joven para gente joven. Pero la industria automotriz mundial en los países desarrollados viene experimentando problemas, desde antes de la crisis. En el departamento de Diseño Industrial de la Escuela Técnica Ort II de Buenos Aires creen que el trabajo adelantado puede ser tomado por la automotriz, una vez que se restablezcan las condiciones normales de la economía mundial.
El DAT (Centro de Diseño, Arte y Tecnología) es el ámbito en donde se desarrolla esta actividad de avanzada, que consiste en el rediseño e incorporación de nuevas tecnologías a un clásico como el modelo francés. El ambicioso proyecto llevó varias etapas y hoy se encuentra en su fase final.
Así, emplazado en el patio del colegio, el 2CV sobre el que se está trabajando el futuro “nuevo 2 CV” aguarda pacientemente en un stand su momento de exposición pública. Sus autores saben, sin embargo, que su entrada en producción no es una carta ciento por ciento segura.
Según se explica en el sitio especializado Tiempomotor.com, el punto de partida fue la mecánica (chasis, motor, sistema de suspensión) y luego la estructura de la carrocería existente. En la primera etapa se pasó al desarme del auto para encontrar el concepto general del diseño y así, comenzar a hacer las maquetas.
Los alumnos desarrollaron en esta etapa las técnicas de construcción, similares a las de un centro automotor. Le siguió el proceso de despiece en dos dimensiones, por un lado el de los componentes del vehículo y por otro, el desarrollo de diseño de piezas nuevas en escala real. Esto último implica además la terminación de la carrocería, el pintado, pulido y cableado del vehículo entre la CPU y los distintos sensores. Se presentaron cuatro diseños a escala 1 a 4, del cual se elige un diseño consensuado que se lleva a escala real en la que se está trabajando.