Por Luz Saint Phat / [email protected]
Lo advirtió un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) al señalar los principales desafíos que se registran a nivel global
Aún ya avanzado el siglo XXI, todavía existen importantes brechas de género en diferentes ámbitos que impiden la igualdad de derechos y oportunidades para todas las personas.
Estos datos fueron difundidos por la entidad en el informe Perspectivas Sociales y del Empleo en el Mundo: Actualización de mayo de 2024, el cual fue difundido al cierre del mes pasado.
En detalle, el documento plantea que existen -en general- desigualdades preocupantes en el mercado de trabajo, aún cuando para este año se estima que la tasa de desempleo mundial se sitúe al cierre de diciembre en 4,9%, por debajo del 5% correspondiente a fin de 2023. Incluso, señaló la OIT, esta cifra “revisa a la baja”, la anterior proyección que indicaba para este año una desocupación de 5,2%.
Pero, el informe también alertó que existe una “persistente falta de oportunidades de empleo”, con una déficit que situará a 402 millones de personas de todo el mundo que desean trabajar pero no lo consiguen.
“El informe de hoy revela retos críticos en materia de empleo que aún debemos abordar. A pesar de nuestros esfuerzos para reducir las desigualdades a nivel mundial, el mercado laboral sigue siendo un campo de juego desigual, especialmente para las mujeres”, dijo al respecto de los resultados del reporte Gilbert Houngbo, director general de la OIT.
“Para lograr una recuperación sostenible cuyos beneficios sean compartidos por todos, debemos trabajar hacia políticas inclusivas que tengan en cuenta las necesidades de todos los trabajadores. Debemos situar la inclusión y la justicia social en el centro de nuestras políticas e instituciones. De lo contrario, no alcanzaremos nuestro objetivo de garantizar un desarrollo fuerte e integrador”, aseguró el referente de la entidad.
En detalle, en lo relacionado a la cuestión de género, la organización precisó que “las cifras detalladas del informe muestran que las mujeres, especialmente en los países de renta baja, se ven desproporcionadamente afectadas por la falta de oportunidades”.
En cifras, la brecha laboral de las mujeres en los países de renta baja alcanza un sorprendente 22,8%, frente al 15,3% de los hombres. Esto contrasta con los países de renta alta, donde la tasa es del 9,7% para las mujeres y del 7,3% para los hombres, se observó.
“Estas diferencias son sólo la punta del iceberg, ya que el número de mujeres completamente desvinculadas del mercado laboral es significativamente mayor que el de hombres”, advirtió la OIT.
En tanto, sobre los factores relacionados con esta situación, “el informe concluye que las responsabilidades familiares pueden explicar gran parte de la diferencia observada en las tasas de empleo de mujeres y hombres”.
De hecho, los datos muestran que, a escala mundial, 45,6% de las mujeres en edad de trabajar estarán empleadas en 2024, frente al 69,2% de los hombres.
“Incluso cuando las mujeres están empleadas, suelen ganar mucho menos que los hombres, sobre todo en los países de renta baja. Mientras que en los países de renta alta las mujeres ganan setenta y tres céntimos por cada dólar que ganan los hombres, esta cifra desciende a sólo cuarenta y cuatro céntimos en los países de renta baja”, aseguró la OIT.
3 DE JUNIO
El problema de la violencia de género digital
También en lo relacionado a la cuestión de género, este lunes 3 de junio tuvo lugar una nueva marcha del movimiento #NiUnaMenos, que busca visibilizar la problemática de la violencia de género e intentar avanzar en políticas públicas de prevención y protección.
“Se habla de violencia de género en entornos digitales cuando los comentarios no están referidos al contenido de los mensajes en línea, sino que se dirigen a la persona, con foco en su condición de mujer o identidades disidentes”, explicó el texto difundido por la entidad, precisando que este tipo de violencia incluye el acoso en línea, la difusión no consentida de la información privada, la intimidación y las amenazas.
“Hay que tener en cuenta que en las redes sociales y en el entorno virtual en general, se atormenta y se agrede a mujeres, porque así sucede desde tiempos remotos en la calle, en el trabajo, en la vida pública y privada. La violencia digital de género forma parte de un contexto de discriminación histórico”, aseguró el texto publicado.
Además de precisar cuáles son las modalidades más frecuentes de este tipo de agresiones y cuáles son las características de las personas que con mayor énfasis reciben este tipo de ensañamientos, el documento elaborado por la Fundación COLSECOR ahonda en las estrategias que pueden ayudar a prevenir y luchar contra este flagelo.
Entre estas se encuentra, primero que nada, la implementación de leyes y políticas que penalizan la violencia de género digital. Particularmente en Argentina, en octubre del año pasado, el Congreso aprobó la Ley Olimpia que incorpora a la violencia digital entre las modalidades de violencia de género.
Por otro lado, la educación y la concientización son herramientas claves. Por ejemplo, la Educación Sexual Integral (ESI) brinda herramientas para prevenir el ciberacoso entre niñas y adolescentes.
Finalmente, las redes de apoyo a las víctimas son fundamentales. Algunas de las líneas donde reportar acoso son: 144 (Atención a víctimas de violencia de Género), la Línea 102 (servicio de escucha, orientación, promoción y protección de derechos de niñas, niños y adolescentes), las áreas de Género provinciales y municipales, organizaciones que defienden los derechos de mujeres y diversidades, según enumeró la Fundación COLSECOR.
Si sos víctima o conocés a alguien que sufra violencia de género llamá al 144 las 24 horas.