Una practicante denunció al nuevo sheik del culto porque éste dispuso una barrera física entre ambos sexos al momento de la oración y también prohibió que se unan en comidas y charlas posteriores
Ante la denuncia realizada por una mujer en contra del nuevo sheik de una mezquita, quien al asumir su cargo resolvió que, al momento de practicar el rezo, hombres y mujeres debían estar separados por una barrera física (en el caso, una biblioteca) y tampoco compartieran en pie de igualdad comidas o conversaciones luego del rezo, como sí podían hacerlo con el anterior jefe religioso, el Juzgado de Niñez, Adolescencia, Violencia Familiar y Género de 4ª Nominación de la ciudad de Córdoba realizó un análisis jurídico y legal con el propósito de orientar, a futuro, el ejercicio de los derechos que a ambas partes les asisten, a modo de acción preventiva.
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