ESCUCHARAsí lo aseguró su titular, Guillermo J. Filippelli. También mencionó que la situación de crisis económica no es ajena a la entidad; sin embargo, se trabaja en un aspecto principal que es garantizar al jubilado el poder adquisitivo de sus emolumentos
En el marco de la Semana del Graduado en Ciencias Económicas el titular de la Caja de Previsión Social para Profesionales en Ciencias Económicas, Guillermo J. Filippelli, dialogó con Comercio y Justicia y describió la política que está siguiendo la institución en aspectos de seguridad social y las acciones tendientes a sostener y fortalecer el sistema.
¿Cuándo se creó el régimen previsional y cuál ha sido su evolución?
El régimen previsional para los profesionales en Ciencias Económicas de Córdoba, se creó en diciembre de 1993 mediante la sanción de la ley 8349. Este sistema fue continuidad de la Caja Complementaria y permitió a los matriculados del Consejo contar con una cobertura integral para las contingencias de la vida, tales como enfermedad transitoria, invalidez, vejez y fallecimiento.
El sistema fue perfeccionado en el año 2012, mediante la sanción de una reforma integral (ley 10050 – Legislatura de la Provincia de Córdoba)
Los principales cambios logrados con esta reforma fueron la apertura de cuatro categorías de aportación, a fin de permitir el acceso a un haber previsional que se correspondiera con los ingresos obtenidos durante el período de actividad y la mejora del haber por medio de bonificaciones por años de aportes en exceso y por contribuciones sobre honorarios. Se incorporaron además el pago del aguinaldo y nuevas prestaciones, como la jubilación ordinaria por minusvalía.
En diciembre, la Caja de Ciencias Económicas estará cumpliendo sus 30 años de creación y podemos orgullosamente afirmar que se ha consolidado gracias al compromiso y confianza de todos sus afiliados.
¿Cuáles son hoy las preocupaciones de los afiliados y jubilados? ¿Cuáles son los intereses que marcan la agenda de los afiliados y jubilados en el contexto vigente?
Sin duda alguna, hoy los intereses pasan por la situación económica, por la incertidumbre política y social que condiciona el quehacer diario de los argentinos, en todos los ámbitos. La realidad de nuestros afiliados y jubilados no queda ajena. Sabemos que el haber jubilatorio no es el ideal, o el que quisiéramos para mantener la calidad de vida al momento del retiro. Conocemos también las dificultades que atraviesan los profesionales en actividad, para mantener actualizados sus ingresos en un contexto de elevada inflación, lo que pone en riesgo el cumplimiento del aporte y su permanencia como afiliados dentro del régimen previsional.
Es una situación común que se observa en todas las Cajas de Profesionales, y que estamos abordando conjuntamente con la Coordinadora Nacional de Cajas. Esto requiere trabajar en profundidad sobre la conciencia previsional, para mantener el compromiso de los afiliados en el pago regular de su obligación y propender a que se matriculen a edades más tempranas. Como siempre decimos, un régimen sin base sólida de aportantes no puede perdurar en el tiempo ni garantizar una adecuada cobertura, con integralidad de servicios a sus pasivos actuales y futuros.
¿Cómo están manejando esta situación y qué herramientas están utilizando?
Por el momento, entendemos que lo principal es tratar de garantizar al jubilado el poder adquisitivo de sus emolumentos. Por ello hemos dispuesto refuerzos vía bonificaciones extraordinarias, para complementar el haber mensual.
Un jubilado de categoría mínima, en la Caja de Ciencias Económicas, estará percibiendo un monto mensual de $150.000 en junio, más los adicionales por aportes excedentes o contribuciones de comunidad vinculada que hayan generado durante su etapa activa.
Esto implica una actualización interanual de 147% y una actualización de 85% en lo que va del año 2023, es decir, superior a la inflación observada en ambos períodos.
Por el lado de los activos, hemos postergado los aumentos de aportes vinculados a la movilidad del haber, de forma tal que durante el año 2023 está previsto que la actualización del aporte se mantenga por debajo de la inflación, de forma similar a lo ocurrido en el año 2022. A su vez, el complemento vía bono que se viene liquidando a los jubilados no fue trasladado a los aportes de los afiliados activos.
Es un importante esfuerzo del sistema, pero entendemos que la situación extraordinaria que transitamos lo requiere y la Caja puede hacerlo gracias a la solvencia institucional, actuarial y financiera que se fue construyendo a lo largo de las distintas conducciones, que se mantuvieron firmes en el objetivo de cumplir acabadamente con la protección previsional de todos los afiliados.
¿Qué desafíos considera que tienen como dirigentes de estas instituciones?
Cuidar la relación aportantes-beneficiarios, lograr un adecuado equilibrio entre aportes-haberes, proteger el fondo de cobertura previsional y asegurar el poder adquisitivo de los pasivos se constituyen en los principales desafíos que enfrentan las Cajas de Profesionales.
La convergencia de diferentes programas sectoriales -para activos y pasivos-, con servicios complementarios, permitirán en su conjunto la construcción de una estrategia sólida para revalorizar el régimen previsional entre los afiliados, buscando el crecimiento de la población de aportantes, la mejora en la calidad de vida de los pasivos, la solidez institucional y el fortalecimiento del sistema.
