Declaró el periodista y autor del libro “La Sombra Azul”, Mariano Saravia. Dijo que el actual diputado ya sabía en los 90 que “el Tucán” Yanicelli había sido parte del aparato policial del terrorismo de Estado.
Una vez más el diputado nacional Oscar Aguad fue mencionado en el juicio que se sigue a Jorge Rafael Videla y a otros 30 represores por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.
En esta oportunidad fue el periodista y escritor Mariano Saravia quien aseguró que Aguad sabía en los 90 que el imputado y ex policía Carlos “Tucán” Yanicelli había sido parte del aparato policial del terrorismo de Estado en Córdoba, en los años de plomo.
Actual director de Radio Nacional Córdoba, Saravia es autor del libro “La Sombra Azul”. Durante su relato, reiteró lo publicado en el libro sobre hechos de 1997, cuando el entonces fiscal de Estado Alberto Zapiola “le tiró en el escritorio (al entonces gobernador radical Ramón Mestre) una copia de las declaraciones de (Carlos Raimundo) `Charlie´ Moore (ex preso político) en San Pablo, Brasil, en el que denunciaba a Yanicelli como uno de los torturadores del D2”.
En esa oportunidad, según Saravia, Zapiola le dijo a Mestre: “Mirá gordo a quién estás defendidendo, este tipo (que continuaba revistando en la policía de la provincia) es un torturador”.
De acuerdo con el relato, Mestre le respondió a Zapiola que “el `milico´ (apodo de Aguad, en esa época ministro de Gobierno en Córdoba) me dijo que era un tipo de confianza”.
Luego, el entonces ministro de Gobierno “entró al despacho del gobernador, la discusión subió de tono y Aguad dijo que (Yanicelli) ‘es un tipo que está haciendo las cosas bien’ y Zapiola le contestó: yo no sé qué hace ahora, pero este informe dice que fue un torturador y vos (Aguad) no me digás si puede serlo o no, porque vos, `milico´, en los años 70 estabas jugando al rugby”, relató el periodista.
Saravia dijo además que Yanicelli “fue considerado uno de sus mejores hombres por Mestre”. Recordó también que Luis Rébora, el recientementea fallecido ex rector de la Universidad Nacional de Córdoba, sostuvo en esa época que nadie que hubiese estado en el D2 “era inocente y era claro que ningún ministro o gobernador podía ignorar esto”.