El inicio del trámite jubilatorio no exime al juez federal Norberto Oyarbide del descargo que deberá presentar el 5 de abril ante la Comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura de la Nación ni de la continuidad del proceso disciplinario que podría llevarlo a enfrentar un jury de enjuiciamiento si se da lugar a las denuncias que pesan contra él por mal desempeño.
“El juez federal Norberto Oyarbide comunicó a la Comisión el inicio de su trámite jubilatorio”, informó ayer la consejera Adriana Donato, presidenta de la Comisión de Acusación y Disciplina del Consejo de la Magistratura, al informar ante el plenario las novedades de su área.
Oyarbide fue citado para el martes 5 de abril a las 9 por el artículo 20 del reglamento de la Comisión de Disciplina y Acusación, para que presente su descargo ante las denuncias por mal desempeño de sus funciones.
Según explicó Donato, representante ante el Consejo de los abogados de Capital Federal, “el trámite en el Consejo de la Magistratura sigue su curso sin que se modifique la situación del magistrado” ante el inicio de su trámite jubilatorio.
Después de la declaración del juez ante el Consejo, el trámite continuará en la Comisión de Acusación y Disciplina que, con base en su descargo, decidirá el inicio, o no, de un juicio político al magistrado.
“Lo único que pone fin a un trámite disciplinario es una situación por la que la persona deja de ser juez”, explicó el consejero Leónidas Moldes, representante de los jueces en el Consejo de la Magistratura. “Hoy no cambia nada”, coincidieron Donato y Moldes, aunque reconocen que si Oyarbide obtiene la jubilación o presenta la renuncia, y ésta es aceptada, el trámite disciplinario “se cae”.
Si bien Oyarbide lleva tiempo anunciando su voluntad de abandonar el Poder Judicial con el inicio de su jubilación, los trámites los inició luego de que el Consejo de la Magistratura decidió su citación.