El excomisario Pablo Márquez fue condenado a tres años de prisión por los delitos de coacción continuada y abuso de autoridad continuado.
Por unanimidad, el jurado popular reunido en la Cámara Sexta del Crimen halló responsable al exjefe del Cap 8 de ordenar detenciones arbitrarias con el objetivo de engrosar estadísticas. Además, recibió inhabilitación especial y absoluta por seis años.
Por su parte, el abogado querellante, Carlos Nayi, pidió seis años de prisión y que se lo detenga en el momento de dar a conocer la sentencia: “Es una sanción ejemplar ya que Márquez utilizó el Código de Faltas como un Código Penal paralelo, prefabricó situaciones inexistentes, rompió el contrato social y se volvió contra la sociedad”, manifestó.
En la sentencia, cuyos fundamentos se conocerán en quince días, se ordenó enviar los antecedentes a la Fiscalía de turno para proseguir la investigación del papel de los superiores de Márquez.
La causa contra Márquez se inició a partir de denuncias de subordinados a los que exigía incrementar el número de arrestos para elevar la “productividad” del Comando de Acción Preventiva (CAP) 8 que comandaba.
Con esa finalidad, sus subordinados debían valerse arbitrariamente de figuras del Código de Faltas provincial y quienes no cumplían esas directivas eran objeto de presiones y sanciones, como el recargo de trabajo sin el pago de horas extra.