El Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) de Córdoba, a través de su secretario general Omar Dragún, manifestó ayer que es complicada la situación de las empresas autopartistas y estimó que recién a fines de 2009 y principios de 2010 se va a reactivar la industria automotriz.
Dragún dijo que la caída en las ventas se ha sentido menos en Argentina que en Europa. El dirigente reafirmó un acuerdo con Iveco para extender los contratos temporales por tres meses, hasta el 30 de junio. Esta medida beneficiaría a unos 89 operarios, según señaló. Además, los efectivos tendrían asegurado su puesto de trabajo, al menos, hasta fines del corriente año. Sin embargo, en firmas autopartistas existe desconfianza. Cristián Sosa, un empleado de Gestamp, expresó que hace mucho se viene comentando sobre la prorrogación de los contratos. No creemos esta situación y hasta tanto no haya una propuesta concreta van a continuar las protestas.
General Motors
La filial local de GM, frente a la posibilidad de que la empresa en EEUU se acoja al “Chapter 11”, paso previo a la bancarrota, aseguró que la compañía no tiene ningún riesgo para cesar sus operaciones en el país. Fuentes de la automotriz aseguraron que la reestructuración que lleva adelante la empresa “no afectará a la compañía local porque somos una entidad legal distinta e independiente, tanto en lo económico como en lo financiero”.
De presentarse en concurso de acreedores GM Argentina no debería responder. Igualmente la fábrica local se prepara para enfrentar un mercado restringido concentrándose sólo en la marca Corsa, ya que dejó de fabricar el Grand Vitara de Suzuki.