La entidad bancaria confía la administración de sus tres millones de clientes a este software de gestión provisto por CobisCorp, una compañía ecuatoriana. Por Laura Pantoja /[email protected]
Desde el año 1998, Banco Macro elige el sistema Cobis para administrar más de 400 sucursales, 8.000 puestos de trabajo y más de tres millones de clientes en todo el país. El core banking de Cobis es una solución creada por CobisCorp, una firma con sede en Quito, Ecuador, que se presenta como la socia tecnológica de la industria bancaria.
El software está orientado a satisfacer las necesidades de instituciones de cualquier tamaño o especialidad, por medio de productos y servicios; y del soporte mediante diferentes canales físicos y electrónicos.
Resuelve la operativa de misión crítica de front office: interacción con clientes y la generación de productos y servicios; y de back office, es decir, el procesamiento de todas las transacciones del sistema.
El sistema de gestión está compuesto por los siguientes módulos: clientes, mesa de cambios, activas, contabilidad, régimen informativo, impuestos, cajas de seguridad, jubilaciones, recaudaciones, cuentas corrientes, cajas de ahorro, gestión de clientes, remesas, plazo fijo, administración de riesgos.
“Además contamos con una serie de aplicativos que complementan la funcionalidad de Cobis permitiendo administrar otros productos como cuentas corrientes, cajas de ahorro, préstamos, garantías, tarjetas de débito, plazo fijo, cajas de seguridad, jubilaciones, recaudaciones y transferencias”, precisaron a Comercio y Justicia fuentes de la entidad bancaria. También se suman otros aplicativos integrados que soportan la operatoria de productos como tarjetas de crédito, descuento de documentos, seguros, leasing, comercio exterior, títulos, fondos, Datanet, Banelco, imágenes de cheques.
Para consolidar esta plataforma, Banco Macro emprendió durante este año la implementación de Cobis TS, una versión del sistema que permite orientar el core del banco hacia una capa SOA (arquitectura orientada hacia servicios, por sus siglas en inglés). Es un estilo de arquitectura tecnológica que explota los principios de orientación a servicios y permite a las aplicaciones interactuar entre sí, considerando sus funcionalidades como servicios que pueden ser vistos como “una tarea repetible dentro de un proceso de negocio”. El resultado es la obtención de servicios relacionados e integrados que permiten dar soporte a un proceso de negocio. La solución tardará nueve meses de implementación, según confiaron las fuentes de la entidad.
Las plataformas
La plataforma principal del banco -que da soporte al sistema core transaccional de la entidad- se basa en equipamiento Risc de IBM con sistema operativo AIX para el procesamiento, equipos DS8100 IBM para almacenamiento y Sybase como motor de base de datos. Integra también la solución Kernel -de monitor transaccional- de Cobis. Otra plataforma utilizada para varios aplicativos de servicios departamentales o productos específicos es la integrada por servidores Intel con sistema operativo y base de datos de la línea de Microsoft.
Virtualización
Se utiliza en ambientes de testeo y capacitación a través de dos productos VMware (provisto por IBM) y Virtual Server (provisto por Microsoft). En relación con el almacenamiento centralizado, se basa en un conjunto de equipos de la línea DS y Shark (línea anterior) de IBM conectados en forma segmentada por medio de una configuración tipo SAN, que permite flexibilidad de acceso manteniendo niveles de seguridad adecuada.
“No hemos comenzado a utilizar la figura de cloud computing pero hemos tenido reuniones con proveedores para comenzar un análisis, falta ahondar sobre la factibilidad técnica de aplicarlo al banco y que limitaciones de normativas pueden afectar su implementación”, especificaron los voceros especialistas del banco.
Telecomunicaciones
Sus proveedores son Telecom, Telefónica, Telmex, Metrotel. La red actualmente es frame relay (se utiliza para un servicio de transmisión de voz y datos a alta velocidad que permite la interconexión de redes de área local separadas geográficamente) y se está migrando a MPLS (se despliega en el núcleo de la red del proveedor de servicios, lo que le proporciona un mayor control sobre la calidad del servicio, y puede transportar múltiples protocolos distintos y de forma simultánea). La red tiene una topología de estrella, en la cual las sucursales convergen sobre un anillo central que une los edificios principales en Capital Federal. Es prácticamente tolerante a fallas por su redundancia y alternativas de caminos.
Call center & redundancia
La infraestructura está integrada por un call center propio de 1.300 m2, con monitoreo remoto de avanzados sistemas de seguridad con cámaras especiales, aire acondicionado inteligente y racs de tecnología de comunicación. También dispone de tecnología IP capaz de transmitir voz y datos. Está equipada con sistemas de configuración con redundancia, que permiten asegurar la continuidad de la prestación de los servicios ante cualquier contingencia. Con el mismo objetivo, el edificio cuenta con generación eléctrica propia para un lapso de 10 horas en todo el edificio y dispone, además, de un sistema de autogestión y grabación de todas las llamadas, el cual brinda servicios a más de tres millones de clientes en todo el país.